El párroco emérito de la iglesia de la Santa Cruz de Villanueva fue despedido el domingo por la mañana por cientos de fieles de localidad. Sebastián Martín Murillo falleció a los 79 años víctima de una grave enfermedad contra la que luchó varios meses.

"Villanueva ha sufrido una gran pérdida por la calidad humana de la persona que se ha muerto", expresó el alcalde Miguel Angel Gallardo.

La capilla ardiente se instaló en la sacristía de la parroquia, hasta donde se acercaron muchos vecinos a darle el último adiós, como ocurriera durante el sepelio que estuvo presidido por el Obispo de Mérida-Badajoz Santiago García Aracil, y el arzobispo emérito, Antonio Montero.

Don Sebastián, como todos lo conocían, fue una persona muy querida en el barrio obrero, a cuyos vecinos siempre consideró su familia. Esta muestra de afecto se materializó el 16 de noviembre del 2003 cuando se inauguró una plaza con su nombre.

ADIOS A ADOLFO CASTRO Don Benito dio, por su parte, ayer un sentido adiós al conocido cocinero y restaurador Adolfo Castro, dueño del restaurante del mismo nombre, que falleció a los 51 años víctima de una enfermedad.