La concejala de Seguridad Ciudadana de Don Benito y diputada del PP en la Asamblea, Josefa Valadés, apostó ayer por el aumento de las penas para los que infringen la ley y "tienen comportamientos que atentan contra la convivencia". Estas afirmaciones las hizo al pronunciarse sobre la agresión sufrida días atrás por la dependienta de una perfumería por parte de dos rumanos que entraron en el establecimiento.

Ante la alarma creada tras el suceso entre los comerciantes y vecinos, que incluso están recogiendo firmas para solicitar más seguridad y vigilancia policial, la concejala informó de que la Delegación del Gobierno y el ayuntamiento trabajan estrechamente, y desde el primer momento, para evitar que se repitan situaciones como la descrita, entre otras actuaciones, con la presencia de policías patrullando a pie para que la gente se sienta más segura y protegida.

Respecto el incidente en la perfumería, que acabó con una trabajadora en el hospital, Josefa Valadés lo calificó de "atentado contra la convivencia" y "suceso gravísimo" pero recalcó que ha sido un hecho puntual porque "Don Benito es una ciudad que se define por su tranquilidad", pese a la oleada de robos que se están sucediendo en establecimientos e incluso en la ermita de las Cruces donde ya han entrado hasta en dos ocasiones.

PROBLEMA CULTURAL Para Valadés, el problema de fondo es cultural y educativo porque "hay personas que por su educación y su forma de vida necesitan que les pongan en orden y personas que les controlen y les vigilen". Cree también que la sociedad está marcada no solo por la crisis sino también por "una crisis social y de valores en la que existen comportamientos incívicos que atentan contra la convivencia ciudadana", de ahí que considere necesario adaptar la legislación a la realidad social.