Los dombenitenses y conductores que transitan por las calles de Don Benito no acaban de acostumbrarse a la zona azul, que más que un sistema para la regulación del estacionamiento en la zona centro parece haberse convertido en una máquina de hacer caja.

No en vano, tal y como ha confirmado a EL PERIODICO el edil de Tráfico dombenitense, Santiago Merino, la policía local ha tramitado ya unas 2.000 denuncias en los dos primeros meses que lleva funcionando la zona azul, desde que se pusiera en marcha el 8 de noviembre del 2004. Esto supone casi cincuenta denuncias al día, aunque hay que recordar que los sábados por la tarde y toda la jornada del domingo este servicio no está operativo.

Según la ordenanza reguladora de este sistema, los conductores denunciados deben abonar una sanción de 60,10 euros. En este caso, según Santiago Merino, la mayoría de las denuncias se deben a que no se adquiere el tíquet correspondiente, aunque también hay algunas que se han puesto por estacionar en la zona verde reservada a los residentes.

El concejal, no obstante, señala que en estos dos meses la grúa que aportó la adjudicataria del servicio tan sólo ha retirado un vehículo.

Quejas

La zona azul si ha motivado numerosas quejas por parte de los vecinos, sobre todo por el hecho de que los expendedores no devuelvan cambio y, asimismo, no admitan monedas ni de uno ni de dos céntimos, a pesar que el precio mínimo de un tíquet es de 15 céntimos. Un cambio, por cierto, que tampoco llevan los controladores y que a algunos conductores les ha supuesto ya más de un disgusto, después de que hayan ido a cambiar a una tienda cercana para sacar el billete de la zona azul y a su vuelta se han encontrado con la correspondiente multa en el coche.