Esta obra nos cuenta la vida de una chica siria de 16 años, llamada Nasrine, desde que se queda sin familia tras la muerte de su madre luchando en el frente Kurdo y un bombardeo acaba con su casa situada en Alepo, hasta que llega a Alemania como refugiada. Su madre, antes de morir, al ser su único familiar, le deja escrito en su libro favorito sobre la vida de la Princesa Omeya Wallada una serie de consejos y rutas señaladas que debe seguir para poder salir del país y llegar a Alemania.

Nasrine inicia esta travesía apoyada únicamente por estos consejos y acompañada por las vivencias de su heroína mítica, Wallada, última princesa del Califato Omeya cordobés que supo mantener sus derechos como mujer en un mundo gobernado por hombres y cumplir el sueño de abrir un paraninfo literario con sólo 17 años en un período de grandes conflictos bélicos.

Dos crónicas documentadas de dos grandes mujeres, que aún a pesar de la distancia histórica, guardan mucha más relación y paralelismos entre ellas de lo que imaginamos. De esta manera, Nasrine toma como ejemplo a Wallada en su tesón, valentía y amor a la libertad a la hora de salvar obstáculos, y así Wallada va iluminando todos los pasos de la adolescente en su largo viaje, apareciendo en sus sueños e incluso haciéndose presente en los momentos más crudos de su realidad, actuando como catalizador evasivo de su sufrimiento en una atmósfera cargada de momentos oníricos, donde la danza y la poesía adquieren gran importancia.

Una simbiosis de vivencias que nos hacen profundizar en el poder del alma humana frente a las dificultades y en cómo éstas nos hacen crecer como personas.

“Bienvenida oscuridad, me enseñarás la luz del alba”.