Un elegante vestido de raso duquesa con tul de seda, cola y broche en la espalda le ha dado a Rosa León la victoria en la final de la segunda temporada del 'talent show' de los modistos de TVE-1, 'Maestros de la costura'. El concurso ha sido una especie de medicina para esta decoradora sevillana de 51 años que ha montado su propio taller, colabora dando clases a mujeres desfavorecidas del barrio de las 3.000 Viviendas de su ciudad y hace poco más de un año superó un cáncer de mama.

Ha sido la concursante más constante a lo largo de todo el programa. De hecho, fue la primera que consiguió plaza para el duelo final. Se esperaba lograr la victoria?

No me lo esperaba porque nunca me lo había planteado. No me gusta mirar tan lejos, prefiero mirar siempre lo que tengo delante. Y lo que tenía delante eran pruebas semanales y de expulsión, y estaba totalmente concentrada en eso.

¿Qué le pareció el vestido de lentejuelas de su rival en la final, Isabel?

Precioso, muy en su línea. Pero tuvo algún fallo más que yo.

Para el diseño de su vestido se inspiró en su madre.

En el traje de novia de mi madre. Cuando dijeron que hiciéramos un traje de alfombra roja, para mí era el que tenía más cercano. Me inspiré en ella para dedicarle el programa, porque ya no está con nosotros. Pero en todo momento ha estado a mi lado.

Fue ella la que la introdujo en el mundo de la costura.

Ella tenía una tienda de ultramarinos, pero aparte hacía arreglitos porque le encantaba coser como 'hobby', igual que yo, que desde siempre he hecho cositas para mí y para mis hijas, a nivel autodidacta. Cuando era pequeña no había tanto jaleo de teles ni programas, mi madre cosía y yo estaba a su lado y, desde los 5 o 6 años, le iba haciendo vestiditos a las muñecas con los retales. Después estaban los grupos familiares de tías y cuñadas que se reunían para coser para hacerle vestidos a sus hijas, o hacerse el ajuar, y se me quedó en la retina cómo disfrutaban.

En un mundo de blogueros, 'instagramers' y 'youtubers', ha ganado la única concursante que sabía usar una máquina de coser de las de antes

Yo eso de 'youtubers' e instagramers no sé ni cómo se pronuncia! Aprendí a coser con ese tipo de máquinas, y de hecho sigue ahí en casa de mi madre, así que fue como un viaje al pasado.

¿Ser la más veterana del grupo le ha beneficiado?

No te creas, porque muchos han estudiado diseño y moda y llevan años cosiendo. Me ha podido beneficiar no en el tema de la costura, sino por la experiencia como persona. Hay que utilizar un poquito la inteligencia y había mucha gente ahí que no pensaba en superar la prueba en sí porque le podían los nervios. Yo controlaba más los nervios, me daba cuenta de lo que estaba pasando y por eso he disfrutado tantísimo el programa.

Su vestido de la final era muy Caprile. De hecho, él lo alabó mucho.

Sí, Caprile, Balenciaga, porque mi estilo se asemeja a ese estilo clásico, elegante, tradicional, con un puntito mono. Yo con el estilo que más me identificaba era con el de Caprile.

En cambio, Palomo Spain mostró predilección por el diseño de su rival, Isabel.

Yo siento adoración por Palomo, pero sus diseños y los de María Escoté son más modernos y atrevidos, con lo que se pueden identificar más con el estilo de Isabel. Yo tiraba más hacia Caprile, su juicio me importaba mucho. Y era el más duro conmigo, aunque en la final fue muy condescendiente y me valoró muy bien.

¿Es su diseñador favorito?

Caprile me encanta, tamibén Teresa Helbig, que la conocí a través del concurso, Chanel me ha gustado siempre... El programa me ha ayudado a conocer a muchos diseñadores y muchos talleres.

¿Le ha propuesto algún diseñador visitar su taller?

Sí, fui varios días al de Palomo. Tiene un cortijo en medio de Posadas, en Córdoba, con un taller muy cosmopolita con gente de Portugal, de Londres, de Cádiz Hay un ambiente de cariño brutal, y por eso salen las prendas tan bonitas.

Este año, el concurso ha terminado con bastante buen rollo, aunque al principio hubo muchos rifirrafes entre Lara y Anastasia.

Tendrás más 'feeling' con unos y con otros, pero siempre tiene que haber respeto, te caiga mejor o peor alguien. Y allí hubo un momento en el que se perdió el respeto. Intentaron solucionarlo, pero el tema entre Anastasia y Lara quedó ahí porque las dos tienen caracteres fuertes y chocaban. Yo, con mi edad, intentaba mediar y calmar los nervios, y por eso se me vio un poco medio mandona. Pero no era por mandar, sino por decir: "Hasta aquí". Las dos dormían juntas en la misma habitación, así que imagínate.

Usted se ha mantenido al margen de esos roces, pero siempre intentando tener a Pedro, otro de los concursantes, alejado de su equipo

Lo que pasa es que me ponía muy nerviosa porque no quería ir a la expulsión, aunque al final iba siempre. Pero Pedro es un amor, es un cielo, lo que pasa es que solo tiene 19 años.

Estuvo en siete de las nueve pruebas de expulsión. Ha sido una superviviente.

Totalmente. Además, me descomponía el día de la expulsión, me fallaban los nervios, me ponía muy tensa Porque fallas y te vas a tu casa, y yo no me quería ir, así que luchaba a capa y espada por mantenerme.

También es una superviviente en la vida. Superó hace poco más de un año un cáncer de pecho.

Sí, cuando entré en octubre en el programa estaba todo muy reciente. No hacía ni un año que había terminado el tratamiento con la quimioterapia y me habían operado. Desde que estaba terminando con la última sesión de quimio, estaba ya pensando en qué iba a hacer después, alimentándome de las ilusiones.

¿Fue cuando decidió montar su taller y colaborar con la Fundación Alalá?

Esos dos proyectos fueron parte de mi medicina, y el programa fue el postre de la medicina, me ha servido para cerrar el capítulo del cáncer. Presenté este proyecto en la fundación para dar clases de costura, dentro de mi humilde sabiduría, a estas señoras del barrio marginal de las 3.000 viviendas, y les pareció fenomenal, así que voy dos tardes por semana. Las estoy formando con la idea de que acaben trabajando, por lo menos alguna, en el taller.

¿Cómo será su colección cápsula en El Corte Inglés, que diseñará gracias a ganar el concurso?

Ya la he acabado. Para la colección me he inspirado en cuando era pequeña. Mis inicios en la costura se remontan a cuando era niña, después seguí haciéndoles vestidos a mis hijas y, en dedicación a las niñas que empiezan en este mundo de la moda, la colección cápsula es de moda infantil para niñas, en la cual he querido lanzar también algunos de los modelos del concurso, como el kimono, el vestido naranja con las flores y el esmoquin plateado con la cinta.

¿A partir de ahora... Cuáles son sus planes?

Seguir sacando para delante el taller con mucho trabajo, pero muy contenta por estar haciendo lo que me gusta. Damos clases de corte y confección, hacemos encargos a medida, arreglitos... Ahora no damos abasto con los trajes de flamenca para la feria. Después del programa, tengo el taller desbordado de alumnas, y he cogido el localcito de al lado.

¿Y sigue con la fundación?

Claro! Lunes y martes por la tarde me voy allí con mis madres, que son encantadoras, y muy graciosas, porque igual están cosiendo que cantando o bailando por lo bien que les ha salido una prenda. Es un taller lleno de vida.