Kiko Matamoros está luchando contra un adicción. Así lo ha reconocido en sus redes sociales, donde ha anunciado el inicio de su batalla, tras un consejo de su médico: "Me lo ha aconsejado y lo voy a intentar".

La adicción de Kiko Matamoros es la de millones de españoles: el tabaco. Lo ha anunciado a través de su cuenta oficial de Instagram, en la que también ha reconocido que lleva mucho tiempo pegado a los cigarrillos y que fuma "muchos paquetes diarios". "Mi neumóloga me lo ha aconsejado y lo voy a intentar", ha reconocido, en una publicación acompañada de una fotografía suya, pitillo en mano.

En menos de 24 horas, su publicación ha conseguido numerosas reacciones. Más de 20.000 "me gusta" y decenas de comentarios, la mayoría de apoyo para la lucha que inicia Matamoros. "Mucho ánimo", le desean sus seguidores.

Coto Matamoros acusa a su hermano Kiko de estar enganchado a la droga

Todo viene de un clip de una entrevista de Jordi Wild para su espacio "The Wild project". En ella, Coto Matamoros afirma que su hermano Kiko y otros miembros de Sálvame se drogaban. "Cada vez que me cruzaba con mi hermano me decía: '¿Tienes algo?'", explica Coto Matamoros, en una clara alusión a las drogas. "Ni para comprar . Venga, cómprate un pollo", dice Coto que respondía a su hermano.

Pero las acusaciones no acaban aquí. Coto Matamoros afirma en su entrevista que no sólo Kiko era el que consumía. También señala al presentador Jorge Javier Vázquez. La sombra de la drogadicción extendida por Coto Matamoros también llega a otros miembros del programa. "Son todos iguales", dice.

La audiencia, contra Carlota Corredera

No corren buenos tiempos para Sálvame. Tampoco para Carlota Corredera. La presentadora del programa está más en entredicho que nunca. Buena parte de la audiencia culpa a la gallega de las bajas cifras de audiencia del programa de Telecinco. Eso, y su defensa de Rocío Carrasco, ha sido la sentencia para parte de los telespectadores, que ahora se han organizado en las redes sociales para tratar de echarla de Sálvame.

La controversia con Carlota Corredera comenzó en plena emisión de "Rocío, contar la verdad para seguir viva", la docuserie en la que Rocío Carrasco desveló algunos de los pasajes más traumáticos de su vida. Buena parte de ellos, según su relato, estaban protagonizados por su exmarido, Antonio David Flores, al que acusaba reiteradamente de malos tratos.

Corredera dio validez y credibilidad en todo momento al relato de Carrasco, lo que no gustó a parte de la audiencia. Muchos afirmaron que al no haber sentencias condenatorias contra Flores, se estaba vulnerando su presunción de inocencia. Más aún, cuando Telecinco decidió "cargárselo" de todos sus programas.