Greta Thunberg participará en la Cumbre del Clima de Madrid. Una adolescente ecologista que ha conseguido movilizar las conciencias sobre la situación de emergencia climática que afecta a nuestra única Tierra. Sus detractores la atacan criticando que padece síndrome de Asperger, como si ese trastorno impidiera observar y ser crítico ante un problema grave como el que nos afecta. También que debería asistir a la escuela en vez de estar viajando por el mundo, como si esa niña de 16 años no hubiera adquirido con esa experiencia unos conocimientos sobre ese tema más amplios que los aprendidos en cualquier universidad. Y se critica a sus padres diciendo que es utilizada como un objeto de márketing sin reparar en que, como otros personajes famosos y mediáticos, ha sido muy útil para situar en la actualidad una problemática como esta. Y lo más gracioso, que aparece en fotografías con algún objeto de plástico, como si debiera repasar la utilería de la escena con la multitud de objetos que nos rodean. Esta joven es un ejemplo para otros que luchan por una buena causa que nos afecta a todos. Greta ha movilizado a multitud de personas y ha hecho tomar conciencia de hacia dónde vamos si no se toman medidas. Es evidente que, como crítica, probablemente no es posible evitar totalmente la utilización de medios y objetos que han permitido el progreso de la humanidad. Pero cada uno de nosotros y los distintos gobiernos podemos comenzar a hacer un uso racional de lo cotidiano, practicando medidas ecológicas y, siempre que sea posible, escoger aquellas opciones que sean menos lesivas para el medioambiente. Siempre hay alternativas.