Hay un cuadro de Ramón Casas y Carbó que siempre me ha gustado especialmente, la pintura al óleo en cuestión se llama Joven decadente. La obra realizada en 1899 esta semana ha sido una imagen recurrente en mi mente; como quien viviese en ese tiempo o como si la añorase debió pensar también en ella quien al preparar el protocolo imaginó que una mujer en una sala debe usar un sofá y ocuparlo con esa actitud. Eso fue lo que deduje al leerlas siguientes palabras en la redacción de la noticia en un diario de tirada nacional: «y que debe acomodarse en el sofá», bien es cierto que podía haberme transportado a otra imagen, pero eso de «acomodarse en un sofá» tratándose de Úrsula Von der Leyen me pareció tan ofensivo que por escoger alguna obra coetánea ese «ehn» que pronunció la presidenta yo solo podría haberlo sustituido por las espartanas de Degas.

Es absolutamente inaceptable lo ocurrido, es inaceptable y, por supuesto, insoportable. En una reunión a la que asiste el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, el presidente del Consejo Europeo, Charles Michely la presidenta de la Comisión Europea Úrsula Von der Leyen en la que se trata, entre otros asuntos, la salida de Turquía del Convenio de Estambul, un tratado para combatir la violencia machista, no solo se trata de protocolo, que por supuesto, es que es simplemente y llanamente machismo institucional, y como tal, como europea y demócrata no puedo más que condenarlo.

Y mientras, en la Asamblea de Extremadura el Grupo Parlamentario Socialista sigue manteniendo ese trabajo silencioso, con esfuerzo y preocupándose de lo verdaderamente importante, de buscar soluciones, de buscar acuerdos y muestra de ello en este pleno, celebrado ayer, presentó el resultado de la Comisión de estudio sobre nuestro sector primario, una comisión que se constituyó en la Asamblea de Extremadura, ante la dificultad que estaban viviendo nuestros productores del campo por los precios y la desigualdad que provoca la existencia de distintos eslabones en la cadena alimentaria a propuesta del Presidente de la Junta de Extremadura tras la reunión que las OPAS y el Presidente mantuvieron, planteó la creación de esta Comisión de Estudio. Solo un grupo parlamentario se ha negado a trabajar en ella, despreocupándose de nuestro campo, de nuestra tierra. Sí el grupo es el de siempre, ese que solo trabaja en busca del estruendo interesado, ese que parece haber pasado de un partido de Estado a uno más bien antisistema. Ojalá y en la reflexión de abandonar a nuestros agricultores y agricultoras, ganaderos y ganaderas, encuentren el verdadero significado del interés general.

«Deberíamos vivir tantas veces como los árboles, que pasado un año malo echan nuevas hojas y vuelven a empezar». Con esta cita de La sonrisa etrusca la RAE recordaba a José Luis Sampedro (1917-2013) ayer, cuando se cumplían ocho años desde que nos dejó. Sea, la vacuna contra la COVID inspira esa esencia para afrontar esta primavera.

*Filóloga y diputada regional del PSOE