Cuando el banquero más popular de la historia reciente de España, Mario Antonio Conde Conde (n. 1948), recibió la ayuda de dirigentes de la Fundación Francisco Franco para poder salir de prisión en 2016, se cerró un curioso círculo que relacionaba franquismo, transición política y corrupción.
Ocurrió el 15/06/2016, la última vez que Mario Conde fue detenido, en este caso investigado por crear un entramado empresarial internacional para recuperar los fondos procedentes del ‘caso Banesto’. El juez Santiago Pedraz le había impuesto una fianza de 300.000 euros. Sus dos avalistas fueron los hermanos José Ángel Alonso García y Jaime Francisco Alonso García, ambos relevantes en la fundación franquista y, concretamente, Jaime Alonso, vicepresidente ejecutivo. Ofrecieron como aval cuatro fincas en Corralejo (Fuerteventura) tasadas en 610.818 euros. Conde y Jaime Alonso habían compartido aventura política años antes; Mario Conde, incluso, fue padrino de sus hijas.
Probablemente no existe mejor símbolo de la corrupción del llamado ‘pelotazo’ que el personaje que nos ocupa hoy, que durante un tiempo llegó a pasar incluso por ‘progre’, tan fácil como era parecerlo en la España de los ochenta y noventa. Procedente de una familia modesta (empleado público y ama de casa) y nacido fuera de la capital del reino (Alicante), no solo aprobó la carrera de Derecho con brillantez en la Universidad de Deusto, sino que a los 24 años (aún durante el franquismo), aprobó las oposiciones de abogado del Estado con la mejor nota de la historia de ese cuerpo funcionarial.
Antes de cumplir los treinta accedió a la dirección general adjunta del laboratorio farmacéutico Abelló, donde labró estrecha relación con el hijo del fundador, Juan Abelló Gallo, personaje fundamental de la España económica de la época. Conde y Abelló adquirieron el 23% de la farmacéutica Antibióticos S.A. en 1984, que fue vendida tres años después a la multinacional Montedison por 58.000 millones de pesetas, la operación económica más importante de España hasta aquel momento. Con ese dinero entran en Banesto, donde Conde es nombrado presidente con 39 años.
El 28/12/1993 el gobernador del Banco de España, Luis Ángel Rojo, decidió intervenir la entidad, debido al agujero de 2.704 millones de euros que Conde acumulaba tras seis años de gestión. La primera vez que Conde ingresó en prisión fue el 23/12/1994, acusado de apropiación indebida (de en torno a 7.000 millones de pesetas, más de 42 millones de euros), estafa, falsedad documental y maquinación para alterar el precio de las cosas. Solo estuvo 34 días.
En 1998, y en el marco del ‘caso Argentia Trust’ (desvió 3,6 millones a la entidad, procedentes de Banesto), fue condenado a cuatro años, de los que cumplió año y medio. El 31/03/2001 fue condenado de nuevo, esta vez por el ‘caso Banesto’ (estafa y apropiación indebida), a catorce años de cárcel que fueron revisados por el Tribunal Supremo (29/07/2002) y convertidos en veinte, de los que terminó cumpliendo seis. El 19/08/2004 fue destituido Jesús Calvo, director de Alcalá-Meco, por trato de favor hacia el ex banquero.
Conde también intentó ser político. En 1998 se afilió al CDS, partido creado por Adolfo Suárez, ex presidente del Gobierno, que pretendió convertirlo en heredero de UCD. En 2000, Conde fue candidato a la presidencia del Gobierno, pero solo logró 23.576 votos. El 20/06/2011 registró Sociedad Civil y Democracia (SCD), con el que se presentó como candidato a presidir Galicia en las elecciones de 2012, pero solo le votaron 15.990 personas.
En su último proceso judicial (2016) —definitivamente archivado por el juez Pedraz el 30/05/2019— el auxilio franquista a Conde resolvía las posibles dudas sobre la ideología del ex banquero, expidiendo un nuevo certificado simbólico sobre la Transición española y nuestra débil democracia. Cabe recordar que Conde fue considerado ejemplo durante décadas en España, e incluso la Universidad Complutense de Madrid le nombró doctor ‘honoris causa’ (09/06/1993), título retirado el 11/04/2016. Según el último informe de la Agencia Tributaria (28/06/2021), Mario Conde sigue siendo la octava persona física más morosa de España, con 8.365.895,99€.
*Licenciado en CC de la Información
