El Periódico Extremadura

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Guillermo Fernández Vara

Tribuna abierta

Guillermo Fernández Vara

Ambición por Extremadura

Es tiempo de ambición, de abandonar el lamento y el quejío

Rehúyo de las personas que no dudan de nada, de quienes nunca se hacen preguntas de lo que nos envuelve, de lo que nos sucede, de lo que otros dicen y hasta de lo que ellos mismos piensan. En política también me sucede lo mismo. Es muy recomendable partir desde la humildad de reconocer que no tenemos respuestas a todas las preguntas. Es muy recomendable saber que, entre otros, el papel que tenemos los representantes políticos es crear marcos de referencia para que en nuestra tierra haya proyectos industriales que generen riqueza y que creen empleo de calidad con salarios dignos.

Vienen tiempos en los que los extremeños y extremeñas vamos a tener que buscar respuestas que, hoy día, no tenemos. Tendremos que dudar, que hacernos preguntas. ¿Estamos o no dispuestos a que la realidad de Extremadura cambie? Yo sí estoy dispuesto a ello; yo sí tengo ambición por Extremadura.

Muchas veces, lo cómodo es seguir haciendo siempre lo mismo que hemos hecho durante toda la vida. Podríamos caer en la complacencia de todo lo logrado, que ha sido mucho. Pero, tengo claro que, entre seguir luchando contra la pobreza con ayudas, a poder luchar contra esa misma pobreza produciendo riqueza que, adecuadamente redistribuida llegue a la vida de las personas, he elegido quedarme con la segunda opción. Y en ello, voy a poner todos mis esfuerzos y lo voy a hacer con la misma predisposición, tesón, dedicación y trabajo que siempre, pero ahora con mucha más experiencia acumulada al servicio de esta tierra.

La opción, por tanto, es clara: o cambiamos o nos quedamos como estamos. Lo cierto es que al resto de nuestro país le va bien con que sigamos como hasta ahora. El resto de regiones, por ejemplo, están encantadas con el papel que en un momento de nuestra historia se nos impuso; el que vayamos a escribir nuestra propia historia ya les gusta menos. Van a llegar cambios, vamos a generar nuevos problemas al resto de regiones porque ahora vamos a tener las armas para poder competir con ellas en igualdad de condiciones. Nos vamos a tener que defender como región, vamos a ser nuevos competidores y nos van a intentar atacar, pero nos vamos a defender.

Extremadura lidera la revolución verde y digital después de haber llegado tarde a todas las que hasta ahora se han producido. La inversión industrial ya no está solo concentrada en un territorio. Hay un nuevo tablero, y vamos a ser protagonistas. Tenemos que pasar página. Las estrategias que nos han traído hasta aquí ya no sirven para seguir avanzando. O lo entendemos o no habremos entendido nada. En la revalorización de la cadena de valor que estamos viviendo, Extremadura representa un papel protagonista. Se ha acabado el tiempo del lamento en esta tierra.

Hay que ser valientes y ambiciosos. Por eso he propuesto que, por decreto, el litio que se extraiga de Extremadura se transforme en Extremadura

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La nueva estrategia nos va a situar a la cabeza de la industrialización. Tenemos un proyecto de futuro para los extremeños y las extremeñas que permitirá que nuestra población tenga salarios, renta y vidas más justas y dignas. De eso se trata. Nuestro futuro no depende ya de un solo proyecto, si uno se cae, llegará otro. Se trata de que la gente de esta tierra tenga futuro y para eso, entre otras cosas, necesitamos a los proyectos industriales que van a venir para que generen rentas y salarios medios y altos, paguen sus impuestos y con eso mantengamos nuestros colegios, hospitales o centros de mayores: socialdemocracia pura y dura.

Hay que ser valientes y ambiciosos. Por eso he propuesto que, por decreto, el litio que se extraiga de Extremadura se transforme en Extremadura. Claro que habrá quien se oponga, nadie dice que vaya a ser fácil, pero debemos arriesgar, tenemos la obligación de intentarlo.

Es tiempo de ambición, de abandonar el lamento y el quejío, de dejar de decir “sí, hombre, en Extremadura” y empezar a exclamar “¡sí, claro, ahora más que nunca!” Eso se logra con ambición y coraje. Esta tierra está llena de gente con ganas de dejarse la vida y el pellejo por Extremadura. Gentes con ganas de hacer de Extremadura una tierra de la que nos podamos sentir orgullosos. El orgullo que nace al demostrar, a los que han vivido muy cómodos teniendo ellos la riqueza mientras que aquí solo había solidaridad, que las tornas se han cambiado y vamos a competir con ellos, con el resto de Europa y con el resto del mundo. Que a nadie le quepa la menor duda. Solo os pido que tengamos ambición por Extremadura.

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