El Periódico Extremadura

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Carmen Martínez Fortún

La curiosa impertinente

Carmen Martínez-Fortún

El problema de Sánchez

Resulta muy difícil comprender cuáles son las prioridades del encargado de gobernar para todos los españoles

Sánchez viajó ayer a Mallorca a reunirse con las camareras de piso, -me niego a llamarlas kellys- para conocer sus sinsabores. Las camareras de piso, en Mallorca y en cualquier otro lugar de España, son un colectivo que sufre mucho, - como tantos otros en estos momentos de escasez-, que sostiene, en la parte que le toca, la gran industria del turismo, pilar fundamental de nuestra economía, pese a Garzón, y que parece estar recuperándose de manera formidable tras la pandemia gracias a los esfuerzos, capacidad de sacrificio, iniciativa ante la adversidad, imaginación, formación y cumplimiento del deber de los trabajadores que lo integran, cada uno en su papel. 

El mismo día en que el presidente viajaba a Baleares, empezaba en nuestra hermosa ciudad, tan necesitada de iniciativas e impulsos, el Congreso de la Empresa Familiar, el latido de España, como reza su acertado cartel, al que acudió el Rey, y aquí es obligado añadir, aunque me repatea la frase hecha, «como no podía ser de otra manera». 

Ha trascendido en la prensa que «como no podía ser de otra manera» los responsables del evento están atónitos ante la ausencia del presidente del gobierno, que prefirió - se ha dicho contraprogramó- la cita balear para no acudir al mismo. El presidente debería haber estado «como no hubiera podido ser de otra manera» escuchando los sinsabores de las empresas del país, muchas de ellas turísticas y otras de otros ámbitos, pero no estuvo. Incluso, si no quería que el Rey le hiciera sombra en la inauguración, podría haber venido a la clausura. Pero, claro, hubiera debido enfrentarse a la realidad, escuchar críticas, réplicas a su fiscalidad injusta y verdades incómodas.

Resulta muy difícil comprender cuáles son las prioridades del encargado de gobernar para todos los españoles y también lícito pensar que, si no le interesan los problemas de quien, según datos públicos, representa cerca del 90 % del tejido empresarial, genera casi el 70% del empleo total, y tiene una facturación aproximada del 60% del PIB, el hombre tiene un problema. Y nosotros con él.

*Profesora

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