L a derecha gana las elecciones en Extremadura. Aunque el PSOE venció el número de votos, el PP empató en escaños, lo que le permite negociar con Vox un futuro gobierno para la región. La suma de ambos partidos les da 33 diputados, con lo que alcanzan la mayoría absoluta. No obstante, los dos deberán entenderse a partir de hoy dado que el PP ha venido diciendo durante la campaña electoral que abogaba por un gobierno en minoría y los de Abascal pretenden su entrada en el Ejecutivo autonómico. El líder de la formación en Extremadura, Ángel Pelayo Gordillo habló ayer de «cambio histórico» a la vista de las unas y apeló al buen entendimiento con el PP para formar una mayoría que permita el objetivo común de sacar de Extremadura a socialistas y comunistas.
El PSOE extremeño sufrió una verdadera debacle reconocida por el propio Guillermo Fernández Vara, quien llegó a decir que buena parte de la ciudadanía le había dado la espalda. En las elecciones autonómicas celebradas ayer perdió 6 escaños y 7 puntos porcentuales con respecto a 2019, lo que le manda a la directamente a la oposición aunque aseguró que debe hablar con su partido acerca del futuro. El caso es que Guillermo Fernández Vara no ha podido contener la ola a favor del PP que llega desde Madrid y sus políticas no han sido aceptadas por los electores. Los socialistas no solo se bajan de la Junta de Extremadura sino que pierden los ayuntamientos de Cáceres, Navalmoral de la Mata, Trujillo, Llerena y Montijo, además del de Badajoz donde el PSOE venció en los comicios de 2019 pero esta vez el PP ha obtenido una holgada mayoría absoluta.
La verdadera triunfadora de la noche electoral fue María Guardiola, líder del PP, que se convierte en la persona fuerte del partido definitivamente después de derribar al PSOE en uno de sus bastiones tradicionales. Con menos de un año para afianzarse en el cargo, (fue elegida en julio de 2022), esta cacereña ha logrado convencer a la ciudadanía extremeña y ha sabido aprovechar el impulso que le llegaba desde Madrid de la mano de Alberto Núñez Feijóo. El PP deberá ahora entenderse con Vox, si bien lo cierto es que tiene de cara todos los elementos para ser la primera presidenta de Extremadura, gobernando además el PP en las principales ciudades de la región.