La plaza de abastos estrenará una nueva tienda en el mes de febrero a iniciativa de un promotor regional y la cooperativa de vendedores ambulantes Samaria, que tiene la intención de contratar sólo a payos para la venta al público, según explicó el gerente de la plaza, Julián Domínguez; una decisión tomada tras la fallida experiencia del mercadillo que ocuparon hace meses vendedores de etnia gitana y que tuvo que cerrar.

El nuevo puesto venderá ropa y posiblemente también calzado en una superficie de 350 metros cuadrados.

Domínguez advirtió que en esta ocasión no habrá una persona encargada de un puesto en particular sino que la cooperativa se encargará de la explotación directa de la mercancía.

La instalación de la nueva tienda es fruto de una intensa búsqueda llevada a cabo por el gerente, que destacó que ya sólo quedan 3 puestos libres en la plaza de mercado.