No ha comenzado el verano, una época en la que la triste tradición es la de abandonar animales, y el refugio municipal se encuentra «más que saturado», con cerca de cien animales en sus jaulas.

María Salud Mateos, presidenta de la protectora El Refugio, que gestiona la instalación municipal, era ayer clara: «Ya no podemos coger animales, no hay jaulas disponibles». Además, hay animales que llevan mucho tiempo y son muy territoriales y no dejan que entren otros animales en las jaulas. «Los machos no quieren más machos y las hembras no quieren más hembras, se pueden matar y hay peleas».

Así que lo que necesitan, primero, es que no se abandonen animales, para lo que realizarán una campaña en breve de cara al verano con el fin de intentar concienciar a los dueños de mascotas. En caso de que les avisen de abandonos, lo que necesitarán son casas de acogida, que se quedan temporalmente con los animales hasta que son adoptados.

En este sentido, de momento hay «poquitas adopciones» y Mateos no duda de que se adopta más en el extranjero que en España. El propio Refugio gestiona con asiduidad adopciones a países como Holanda o Bélgica.

Sobre el refugio planteado por la Diputación de Cáceres, la protectora considera que «se va a notar, siempre dará un poco de tranquilidad» porque ahora los abandonos de las comarcas también llegan a Plasencia.