El servicio de mantenimiento de parques y jardines de Plasencia se adjudicó en el 2017 por diez años y con dos prórrogas posibles. El pasado mes de agosto se cumplieron esas prórrogas sin que el ayuntamiento lo hubiera adjudicado de nuevo y, desde entonces, lo sigue prestando la misma empresa, a pesar de que, por su alto coste, debe pasar por una licitación pública. Pero así seguirá hasta que se adjudique de nuevo porque el pleno aprobó ayer, con los votos del PP y el rechazo unánime de la oposición, el pago de las facturas que vaya generando la empresa por el servicio.

La aprobación de este primer pago, de 84.308,43 euros, ha supuesto levantar un reparo puesto por el interventor municipal, que se basa en la normativa legal para recomendar la suspensión del procedimiento. Sin embargo, el concejal de Servicios Municipal, Luis Miguel Pérez Escanilla, apeló a la obligación de mantener el servicio y, dado que el ayuntamiento «carece de medios humanos y materiales» para llevarlo a cabo, tiene que hacerlo una empresa. Así lo refleja un informe del inspector de servicios municipales.

También aludió al «principio de continuidad», que significa que la misma empresa siga realizando el servicio y cuenta «con tradición jurídica». Enumeró ejemplos de Aragón, Canarias y otras comunidades.

Escanilla argumentó que se trata de una «situación excepcional» y transitoria porque concluirá una vez adjudicado el servicio, un proceso que se inició el 4 de noviembre con la aprobación en el pleno de los pliegos y la licitación. Subrayó también que no ha habido inacción por parte del ayuntamiento porque «la nueva Ley de contratos le ha dado la vuelta a todo» y se ha tardado en elaborar unos pliegos que incluyen todas las zonas verdes.

falta de previsión/ Sin embargo, toda la oposición se mostró en contra de levantar el reparo y mantener el servicio con este procedimiento. «Por 340.000 euros vamos ya», destacó la concejala del PSOE Cristina Corral. Esta habló de «falta de previsión» y de querer «que miremos para otro lado sobre el informe del interventor. Esto es susto o muerte».

El mismo argumento emplearon Mavi Mata y Paqui García, de Unidas Podemos y Ciudadanos, al recordar los «dos años de prórroga» que ha habido para preparar la nueva licitación.

El de ayer fue un pleno de casi cinco horas en el que el PSOE solo contó con cuatro concejales, al haber renunciado recientemente Raúl Iglesias y Guadalupe Aparicio. Precisamente, se aprobó proponer como nuevos concejales a Blas Martínez y Soraya Cobos.

Por unanimidad se aprobó destinar 967.677 euros al plan de empleo de experiencia del 2020; una modificación presupuestaria para pagar préstamos, intereses de las huertas y el servicio de bomberos; una nueva licitación del suministro eléctrico y desestimar un recurso del intendente por llegar fuera de plazo, además de mociones sobre el presupuesto, empleo y educación.