En el verano del 2017, la Junta puso en marcha, a través del Instituto de la Mujer de Extremadura, seis viviendas para mujeres víctimas de violencia de género en el recinto Valcorchero de Plasencia. Este lunes, la consejera de Igualdad, Isabel Gil Rosiña, ha dicho en la ciudad que este recurso "no funciona".

Precisamente, ha señalado que, "al inicio de la legislatura, tenía encima de la mesas una reorientación de estas casas, que se planificaron hace diez o doce años, pero hoy la realidad es otra. No es sensato tenerlo cerrado". Porque, según sus datos, de las seis viviendas, actualmente solo hay una ocupada. No obstante, desde agosto del 2017 y hasta octubre del 2019, siete mujeres y siete menores utilizaron estas viviendas, según informó el Instituto de la Mujer entonces.

Con todo, Gil Rosiña ha subrayado que, en general, "no se han usado para lo que estaban pensadas" y, por lo tanto, su idea es mantener "un porcentaje" de estos pisos por si hubiera que hacer frente a emergencias y el resto tendrán una "nueva utilidad, para una necesidad real del SES", que no avanzó y que se hará extensivo a todas las viviendas de este tipo que la Junta tiene en la región.

En su opinión, las mujeres víctimas de violencia de género necesitan una vida "menos institucionalizada" y más normalizada, por lo que es preferible que la Junta colabore con ayudas económicas que les permitan, por ejemplo, alquilar un piso.

Atención Psicológica

Otro anuncio que ha hecho este es lunes la consejera es que el Punto de Atención Psicológica de Plasencia se va a reforzar con un profesional más porque es "el que más usuarias recibe de toda Extremadura" y actualmente solo cuenta con una psicóloga.

A su vez, el alcalde, Fernando Pizarro, ha señalado la intención municipal de ampliar la Oficina de Igualdad del ayuntamiento con un gabinete jurídico, que se completaría además con el piso o centro de emergencias también municipal, reabierto en el 2011 y con una oficina de atención a personas LGBTI.

Gil Rosiña y Pizarro han coincidido en destacar que la lucha contra la violencia de género no entiende de colores políticos y hay que afrontarla en coordinación, a la vez que han aplaudido el trabajo de todo el personal implicado.