El Ayuntamiento de Plasencia optará por la soberanía energética ante las «constantes y abusivas subidas del precio de la luz», por lo que comprará electricidad directamente, prescindiendo de empresas intermediarias, para conseguir un ahorro en la factura anual en torno al 15%-20%, que se traduce en hasta 200.000 euros (aunque dependerá de la fluctuación del mercado), según avanzó ayer el alcalde, Fernando Pizarro; acompañado del concejal de Energías Renovables, Sergio López Casares.

Según el regidor placentino, debido al precio disparado de la luz, la factura para el consistorio se ha visto incrementada este verano (en los meses de julio y agosto) en casi 60.000 euros, «y eso, teniendo en cuenta que el gasto en periodo estival es menor, porque los colegios no funcionan, y los edificios administrativos están ocupados a la mitad», entre otros aspectos.

«Esto supone que el dinero vinculado a otras posibles partidas presupuestarias haya que invertirlo en aumentar el presupuesto» destinado anualmente a la factura de la luz; que en el caso de Plasencia ronda los 1,1 millones. «Y siempre se presupuesta por encima para tener un margen, pero con estas subidas es imposible preverlo», ha lamentado Pizarro.

«La factura de la luz la sufrimos todos», añade el alcalde, que especifica que mientras que en el primer semestre del año el incremento de la factura de la luz para el consistorio ha sido de un 10%, en los meses estivales se ha disparado al 30%. En este punto, Pizarro ha señalado que «lo más fácil sería subir los impuestos; pero eso lo hacen otros, con otras siglas».

Por su parte, el edil ha explicado que el consistorio se registraría como agente en el Ministerio de Transición Ecológica «para poder realizar compras semanales de energía». Ya «el mero registro supone la eliminación de tasas de cara a las distribuidoras», que incrementan la factura un 6%.

«A través de un representante, que realizaría las compras al ayuntamiento, adquiriríamos la energía necesaria». Es decir, que el consistorio tendría que contratar una especie de ‘broker’ de la energía que sería el encargado de acudir al mercado eléctrico y conseguir los mejores precios.

«Estar registrados no supone ningún compromiso», asegura el edil. Una opción que «permite además un mayor control sobre las zonas lumínicas de la ciudad, para variar la potencia, de forma que produzca un ahorro en la factura de la luz».

En cualquier caso, es una propuesta que está pendiente de recibir el visto bueno del secretario municipal y el interventor. Y la previsión es que el ayuntamiento opere bajo esta nueva premisa a partir de 2022.

A esta propuesta hay que añadirle que Plasencia conseguirá ahorrar hasta 73.000 euros anuales con el cambio de 852 luminarias proyectado en diferentes barrios de la ciudad, lo que supondrá una reducción de hasta el 65% en el consumo eléctrico, con la mejora de la eficiencia energética del alumbrado público.

Un proyecto licitado por 488.080,34 euros dividido en tres lotes (para que más empresas puedan optar a su instalación, lo que fomenta la participación de las empresas locales), 

Autoconsumo

También ha señalado el concejal que, de forma paralela, se trabaja en fomentar el autoconsumo, con placas fotovoltaicas, en los edificios públicos «para producir nuestra propia energía. Y ayudar al resto de los ciudadanos que quieran abrazar esta opción».

Preguntado por la expansión de proyectos de energías renovables y la posibilidad de que el ayuntamiento cuente con medios de producción propios de energía hidráulica, eólica o fotovoltaica, el concejal ha aseverado que «optar a un parque municipal de generación de energía, de momento, se nos escapa a este ayuntamiento».