Lo primero que se veía de San Gil cuando se creó como pueblo de colonización en 1971 era la torre de su campanario. Ahora, cincuenta años después, se ha transformado en un mirador desde el que se puede ver el crecimiento «exponencial» que ha experimentado la entidad local menor desde su nacimiento.

Porque si entonces las primeras en asentarse fueron 39 familias con un total de 173 personas, ahora son 320 sus vecinos, casi el doble y, según su alcaldesa, Esther Sánchez, la entidad tiene «todas las mimbres para poder seguir creciendo».

De hecho, explica que, al ser de los últimos pueblos de colonización que se crearon, «no se llegó a desarrollar entero» y todavía hay una zona urbana que podría desarrollarse y, según sus cálculos, permitiría que pudieran asentarse «otros 200 habitantes más».

Uno de los que llegaron en los primeros años fue Andrés Moreno, que subía a la torre del campanario cuando era niño y hoy, a sus 79, ha sido el encargado de descubrir la placa de inauguración del nuevo mirador, de 28 metros de altura y con 117 escaleras. Eso sí, San Gil es una entidad que ha apostado siempre por la accesibilidad, de la mano de la asociación Placeat, y la alcaldesa ha explicado que «se está tramitando un proyecto para poner un elevador».

La transformación en mirador ha costado 22.000 euros y la ha costeado íntegramente el ayuntamiento sangileño. La inauguración forma parte de los actos del 50 aniversario de su constitución como pueblo de colonización y al acto ha asistido el presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara y, junto a él, buena parte del a corporación del Ayuntamiento de Plasencia. En representación del alcalde acudieron los concejales David Dóniga y Mayte Díaz y se sumaron antiguos ediles socialistas, incluso la exalcaldesa Elia Blanco, a quien Vara dio un abrazo como saludo.

El presidente regional destacó que «existen pueblos cuya historia está viva» y puso de ejemplo a San Gil. Además, subrayó que los pueblos de colonización son un «fenómeno autóctono», con una arquitectura «identitaria» porque «no hay dos iguales».

Exposición y homenaje

El acto concluyó con una visita a una exposición del artista placentino Agustín Decórdoba, también enmarcada en los actos del cincuentenario, que continuarán este viernes con un homenaje, a partir de las ocho de la tarde en la plaza del pueblo, al que asistirá el expresidente de la Junta de Extremadura Juan Carlos Rodríguez Ibarra.

Según Blas Raimundo, primer alcalde San Gil tras su constitución como entidad local menor y al que se echó en falta en el acto, Ibarra fue uno de los nombres propios que hicieron posible la constitución de San Gil como Entidad Local Menor, el 14 de noviembre de 1997.

Ahora, casi 25 años después, Esther Sánchez se muestra «orgullosa» de lo logrado y lo que pide es «ayuda institucional» para seguir creciendo.