Isabel Ojalvo ha pasado de ser docente en el colegio San José a dirigir Cáritas Interparroquial y el hogar de Nazaret de Plasencia. No duda de que Pablo Vicente, su antecesor, «ha dejado el listón muy alto» y destaca de él su «don de gentes» y su capacidad de relacionarse tanto con el ámbito político como administrativo, por su pasado como político, presidente de la Hermandad de Donantes de Sangre Virgen del Puerto y sus años en Cáritas.
Sin embargo, la nueva directora asume la dirección de ambas instituciones «con ilusión, sabiendo que hay un gran equipo en ambas realidades que está trabajando muy bien».
De momento, señala que está «conociendo más a fondo todo lo que supone la tarea de dirección», ya que apenas lleva un mes en los cargos, pero tiene claro que su idea es «mantener lo que se está haciendo y ver con ambos equipos todo lo que se puede ir mejorando de cara al futuro», subraya.
Con 64 años, ha ejercido durante 41 como profesora en San José, de ciencias en la ESO y de Religión. Además, trabaja de forma activa desde hace años con la parroquia Santa María de la Esperanza, donde ha sido catequista y también lleva más de 35 años como voluntaria de Cáritas, en el grupo parroquial y del grupo de liturgia.
Fue en el mes de mayo cuando se lanzó una convocatoria a las parroquias buscando sucesor a Pablo Vicente y, entre otros, surgió su nombre. En septiembre, tuvo lugar la votación y, en octubre, el obispo de la diócesis, José Luis Retana, ratificó el traspaso en la dirección de Cáritas Interparroquial y el hogar de Nazaret a su favor.
