Plasencia está sufriendo un "desmantelamiento de sus comunicaciones". Así lo ha subrayado su alcalde, Fernando Pizarro, a raíz de la reducción del número de trenes que conectaban la ciudad con Madrid y también del descenso en los destinos en autobús fuera de la comunidad autónoma.

Para Pizarro, el sentir general es que "las administraciones con competencias están dejando incomunicada a la ciudad" y, no solo a esta porque ha hecho hincapié en que esta circunstancia "también afecta a las comarcas, un área de influencia con 200.000 habitantes". El alcalde culpa al Estado y la Junta, y afirma que le preocupa "el silencio del PSOE extremeño".

Como ejemplos, ha puesto que "no existe comunicación con Ávila, es casi imposible ir y para ir a Salamanca, solo tenemos una vía y hay pocos, con lo cual hay dificultades para adquirir billetes, es una yincana".

El cierre de la taquilla para la venta de billetes de autobús el fin de semana y el hecho de que tampoco haya en la estación de tren lo pone como un ejemplo más del desmantelamiento. "No se pueden comprar billetes, así que quitas la oferta y, si no hay oferta, no hay demanda y tienen la excusa para seguir quitando, es la pescadilla que se muerde la cola".

Pizarro afirma que el gobierno local está haciendo un estudio para comprobar cuántos autobuses se han eliminado que hubiera antes de la pandemia y, además de las reuniones con los distintos colectivos de la ciudad, ha recordado: "no descartamos acciones de otro tipo para reivindicar nuestros derechos".