Levantado sobre ladrillos y bordillos, rallado y, sobre todo, sin las cuatro llantas. Así se ha encontrado este jueves una vecina de la avenida Cañada Real de Plasencia su coche, que ocupa una plaza en un garaje comunitario que comparten dos bloques. La broma le va a salir "por 4.000 euros", señala indignada.

La afectada explica que el miércoles salió de trabajar a las tres de la tarde y aparcó el coche en el garaje, al día siguiente, cuando fue al garaje a las ocho de la mañana para ir al trabajo de nuevo se lo encontró en esas condiciones. "Solo le habían quitado las llantas al mío y en otras plazas habían quitado los bordillos", explica.

Denuncia que ya es la tercera vez que alguien entra en el garaje comunitario y que en las dos anteriores robaron en los trasteros, pero sobre todo la "inseguridad" que sienten los vecinos de la zona. "Por aquí pasa la policía constantemente en sus coches, pero no hacen nada. En esta avenida hay vehículos aparcados en doble fila constantemente y no les multan".

Por eso, lo que reclama es "más seguridad" y también afirma que por las noches, a partir de las doce, "hay carreras de coches, desde la rotonda de los Alamitos, les dan igual los pasos elevados, esto es un rallye", por lo que pide también controles nocturnos.