El Ayuntamiento de Plasencia ha decidido dedicar varias calles de la ciudad a responsables de la Peña Flamenca Placentina y la Peña Flamenca Virgen del Puerto.

A Román Hernández, alma mater de esta última, le dedicará la calle Navaconcejo, donde estuvo la primera sede de la peña. A los hermanos Julián y Vicente García, al frente de la peña placentina durante años, les dedicará la calle Cristo de las Batallas. A todos les reconocerá así su «contribución al flamenco».