LOS NIÑOS DE TRES, CUATRO Y CINCO AÑOS APRENDEN JUNTOS

Infantil en el CEIP San Miguel, el Montessori de Plasencia

El ciclo de Infantil de este colegio potencia el aprendizaje a través del juego y la autonomía para que los niños decidan en qué ambiente estar y qué actividad realizar. Padres y docentes han comprobado que funciona

Ambiente de aprendizaje, en el ciclo de Infantil del CEIP San Miguel de Plasencia.

Ambiente de aprendizaje, en el ciclo de Infantil del CEIP San Miguel de Plasencia. / TONI GUDIEL

Raquel Rodríguez Muñoz

Raquel Rodríguez Muñoz

María Montessori tenía claro que el niño debía ser el protagonista de su aprendizaje y el maestro, un observador que le acompañara en caso necesario. Este método y otros similares de destacados pedagogos se llevan a la práctica en el ciclo de Infantil del CEIP San Miguel Arcángel de Plasencia desde hace años. Tanto las docentes como las familias han comprobado que funciona.

Blanca es madre de un niño y una niña que han pasado por sus aulas y destaca que, gracias a este método de aprendizaje, «se han revalorizado los intereses de cada uno. Ellos aprenden por la experiencia y pueden elegir lo que les gusta, se respetan mucho los intereses de los niños».

Por eso, subraya la importancia de haber aprendido a tomar decisiones por ellos mismos y también cómo les ha enriquecido que estuvieran mezclados los niños de tres, cuatro y cinco años. A su vez, valora que las familias puedan acudir a realizar talleres, e incluso a observar a sus hijos.

«Este espacio es muy nuestro, yo lo he vivido con ellos y me gustaría que se pudiera llevar a Primaria porque, tienen tanta base, que aprenden en tiempo récord», asegura.

Ambiente de aprendizaje del ciclo de Infantil del CEIP San Miguel de Plasencia.

Ambiente de aprendizaje del ciclo de Infantil del CEIP San Miguel de Plasencia. / TONI GUDIEL

Rosa María Olivera, coordinadora del ciclo de Infantil, lo corrobora: «si en Infantil te centras en las necesidades que tiene el niño, cuando llegan a Primaria, el aprendizaje les sale solo, lo adquieren en poco tiempo y sin esfuerzo porque ya han adquirido antes las habilidades».

Rosa explica que, cuando el niño es pequeño, conoce lo que le rodea «por los sentidos y la manipulación, su propia acción con lo que le rodea» y además, señala que lo importante es «trabajar el cuerpo» y ya en Primaria se desarrolla el «trabajo mental».

Niños autónomos y libres, en el San Miguel de Plasencia

Por eso, el equipo de profesoras, cinco actualmente, ha ido desarrollando poco a poco, a lo largo de los años, un método basado en los ambientes de aprendizaje y que se basa «en el juego y en la actividad autónoma del niño».

Así, han diseñado espacios con materiales al alcance de ellos y con los que buscan que puedan «trabajar, investigar y descubrir cosas de manera autónoma».

De esta forma, cada grupo, con niños de diferentes edades, tiene un aula de referencia y, cuando llegan por la mañana, van a ellas y hacen un saludo, hablan de lo que van a hacer esa mañana, cantan una canción... Después, se abren las puertas y cada uno puede elegir en qué ambiente quiere estar y qué actividad quiere realizar.

Los hay de arte, escritura y biblioteca, matemático, experimentación y naturaleza, simbólico, de movimiento y exterior.

Pueden cambiar cuando quieran, cumpliendo unas normas, como la de recoger aquello con lo que han jugado.

Después, llega el recreo y, tras el aseo y el tiempo de merienda y patio, comienzan los talleres: de yoga, experimentos, música, cuentos, exterior... «Hay una maestra en cada taller y ellos eligen de nuevo».

Los talleres van cambiando, en función de las necesidades de los niños, que las maestras van observando. Todo desde el respeto a sus gustos y con la idea de que «puedan desarrollar el potencial que traen» y todo también en compañía de las familias, para las que hay puertas abiertas, talleres conjuntos, cafés-tertulia...

Blanca no lo duda y lo recomienda porque, aún sin vivir en el barrio, eligió el ciclo de Infantil del CEIP San Miguel «por el método»

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