El pasado agosto, numerosos trabajadores de la empresa Seyma en Plasencia protagonizaron concentraciones públicas para exigir el pago de salarios que no percibían en muchos casos desde el 2022. Un total de 19 llevaron su reclamación al juzgado y 16 siguen aún en el procedimiento.
Según han explicado los servicios jurídicos de CCOO, los empleados recurrieron al sindicato por los «atrasos en los pagos de las mensualidades». Se acudió al juzgado y, primero tuvo lugar un acto de conciliación y tres de los casos se resolvieron. Sin embargo, otros 16 siguen activos, esto a pesar de que algunos de esos trabajadores ya no forman parte de la empresa -algunos pidieron la baja voluntaria- pero «eso no impide que continúen con su reclamación» porque no han llegado a cobrar las nóminas impagadas.
La demanda se presentó en el mes de febrero y todavía no se ha resuelto porque «se metió la huelga de funcionarios». Así, se han programado juicios para los próximos 24 y 26 de octubre.
Según CCOO, la empresa debe a trabajadores en torno a 60.000 euros. En algunos casos, ha pagado nóminas, en otros no y «la situación se ha seguido dando», por lo que ya existe con algunos empleados «un comportamiento reiterado», lo que conlleva que «la ley da opción de extinguir el contrato». Esto ocurre en cuatro de los casos denunciados, según CCOO.
Banco de alimentos en CCOO
Mientras el juzgado de lo Social número 3 continúa con la tramitación de la demanda, algunos de estos trabajadores han tenido que recurrir a la ayuda de los servicios sociales porque no pueden afrontar el pago de recibos de luz, alquileres o hipotecas.
Unidas Podemos incidió sobre ello y pidió colaboración al ayuntamiento, que contactó con los trabajadores para gestionar ayudas. Además, CCOO abrió un banco de alimentos en su sede de Miralvalle, al que se puede llevar comida de 9 a 2. «Hay trabajadores que vienen porque no tienen ingresos por ninguna parte».