Mejorar la alimentación y hacer ejercicio son los trucos para perder peso sin ir al gimnasio. Esta fórmula debe combinarse con pequeñas dosis de constancia y paciencia porque no se trata de una dieta milagro en la que pierdes kilos con rapidez y facilidad. Y el deportes más económico es caminar, un hábito saludable que nos beneficia en nuestra vida diaria.

De hecho, la Organización Mundial de la Salud (OMS) establece cuántos pasos debemos caminar para estar saludables: 10.000 pasos al día. Esto supone unos 8 kilómetros y, con ello, se previenen enfermedades como la obesidad o el colesterol. Pero si a estos 10.000 le sumas 5.000 más facilitarás la pérdida de peso y conseguirás adelgazar.

Sin esfuerzo, una persona camina alrededor de 2.000 pasos en un kilómetro y medio, que supone quemar 100 calorías. ¡Ojo!, para perder un kilo a la semana, hay que quemar 1.000 calorías al día y supondría andar 7,5 kilómetros.

Camina rápido o despacio

Caminar rápido mejora la respuesta muscular, aumenta el consumo de calorías y facilita el control del peso, activa la circulación cardiaca y genera, disminuye los niveles de colesterol y de glucosa, contribuye al control de la presión arterial y mejora las funciones respiratoria, intestinal y sexual.

Así lo ha asegurado el especialista en Cardiología y Rehabilitación Cardiaca de Policlínica Guipúzcoa, Eduardo Alegría, quien ha recordado que "no es lo mismo" caminar normal que caminar rápido y que la velocidad a la que se realice es importante para valorar los beneficios que aporta esta práctica a la salud.

¿Cómo caminar para perder peso?

Medir los pasos que haces en tu día a día es sencillo. Sólo tienes que hacerte con una pulsera inteligente o con una aplicación para el móvil (el iPhone por ejemplo tiene la aplicación Salud ya de serie). Gracias a estos dispositivos lograrás los mejores resultados.

Lograr los 15.000 pasos al día es sencillo si te organizas. Lo importante también es que lo hagas a lo largo del día. Divide tu jornada laboral. Busca excusas para ir a buscar un documento o para ir al baño y así lograrás sumar más pasos. Cuando acabes la jornada, antes de tirarte en el sofá da un paseo.

Si lo necesitas busca excusas: vete a un supermercado más lejano que el que tienes debajo de casa, o a una farmacia y aprovechas para comprar compuestos de plantas medicinales que te ayudan a adelgazar; o sube a casa por las escaleras dejando de lado el ascensor.