Como en casi todo lo importante de la vida, no existen manuales, ni fórmulas mágicas, ni métodos infalibles, pero ¿cada cuánto tiempo debemos mantener relaciones sexuales con nuestra pareja? ¿Dos, tres veces por semana? ¿Una vez al mes? ¿Todos los días? Ni los sexólogos son capaces de responder a esas preguntas. Tal vez, la respuesta se halla en cada pareja; aunque lo que no cabe duda es que mantener viva y plena una relación exige generosidad, entrega, espontaneidad y, por supuesto, amor.

Además, a quién preocupa más ¿a los hombres o a las mujeres? Parece, según las estadísticas, que este interrogante sí tiene fácil respuesta: a los hombres.

Otra de las cuestiones es dónde: en la cama, en el sofá, en el suelo, en la cocina, en la ducha, en un Simca 1000.

El caso es que evitar la rutina sólo depende de la pareja y de su capacidad de imaginación y, por supuesto, de las ganas.

No obstante, la vorágine del día a día, el trabajo, los hijos, los años, la convivencia y un sinfín más de factores contribuyen a que muchas parejas se adentren en el túnel de la apatía y la desidia. Sin embargo, los expertos aseguran que las parejas que mantienen relaciones sexuales, al menos, una vez al mes son más felices.

Y, en este sentido y para ahuyentar el aburrimiento, la insatisfacción y la desidia, los sexólogos sugieren una media de tres o cuatro veces a la semana como un número óptimo, aunque insisten en no basar la salud de la pareja en el sexo.

Además, recuerdan que las relaciones íntimas benefician a nuestro cerebro porque liberan sustancias químicas (endorfinas) y contribuyen a la oxigenación de la sangre.

En esta frecuencia influye también la edad y en tiempo de la relación. Cuando se empieza, lo normal es 1, 2 y hasta 3 veces al día; posteriormente, desciende a tres a la semana y evoluciona a 1 cada quince días hasta 1 o 2 al mes.

Por último, muchos expertos coinciden en que lo importante no es la cantidad, sino la calidad y la necesidad de cuidar la relación y los vínculos de la pareja.