La lucha contra el coronavirus no cesa y, aunque el mundo intenta volver a la normalidad, nuevos infectados cada día continúan sumándose a la larga lista de casos que se acumulan desde 2020. Las pruebas más fiables para comprobar si tienes covid son las PCR y los tests de antígenos, que ya se pueden adquirir sin necesidad de acudir al centro médico.

Incluso se han desarrollado otros métodos menos populares para comprobar la presencia del virus en nuestro organismo, desde pruebas de saliva por un dispositivo desarrollado por investigadores del Instituto de Ciencias Fotónicas (ICFO) de Barcelona y del Instituto de Investigación del Sida (IrsiCaixa), hasta audios de tos por WhatsApp.

Sin embargo, a veces basta con prestarle atención a nuestro cuerpo para intuir si estamos infectados. Aun así, lo primordial es hacernos un test para confirmarlo, pero en caso de que no dispongas de uno, debes tener en cuenta algunos síntomas tempranos que son identificativos de la variante ómicron del covid para comenzar a tomar las precauciones correspondientes.

En primer lugar, la fatiga, entendida como debilidad o dolor muscular y en segundo lugar, los mareos o desmayos. Ambos síntomas son muy frecuentes independientemente de la variante con la que tratemos pero, muchos de los pacientes que han enfermado con ómicron han comunicado que primero han sufrido episodios de fatiga y después algún desvanecimiento o pérdida leve de consciencia derivado de mareos previos.

Si padeces ambos indicios, hay posibilidades de que estés infectado de covid, pero no es algo comprobado científicamente.