Los empresarios gallegos denuncian el grave deterioro que supone para la economía de esta comunidad la crisis del Prestige. La patronal de la provincia de Pontevedra asegura que unas 7.500 empresas pertenecientes a más de una docena de sectores se ven afectadas por la marea negra. Entre las actividades más dañadas figuran la hostelería, el medioambiente, el transporte y comercialización de pescado fresco y la flota artesanal y extractiva.

De las 12.000 empresas del sector hostelero que hay en la provincia, la mitad se encuentran afectadas por la crisis. Además, medio centenar de firmas medioambientales registran una disminución de su actividad.

La facturación de las empresas de transportes de pescado ha caído un 30% y han perdido sólo en el mes de diciembre unos 24.000 euros (unos cuatro millones de pesetas), mientras que en el transporte discrecional de mercancías por carretera, unas 50 empresas han visto reducida su actividad en un 90% en el caso del mejillón, un 50% en suministros navales y un 20% en paquetería. Además, El presidente del mercado de abastos de Santiago aseguró que en diciembre se registró una venta de pescado y marisco gallego un 70% inferior respecto al año anterior.

El Ejecutivo gallego ejecutará un plan de reactivación económica que impulse la actividad comercial y el tejido productivo para "no perder ritmo en el proceso de convergencia", explicó ayer su consejero de Economía.