La caza es una modalidad deportiva para el Consejo Superior de Deportes, pero pocos de los que la practican son deportistas. Un trabajo de fin de máster de la Uex, realizado por el licenciado en Actividad Física y Deporte José Martín Gamonales Puerto, lo evidencia: "en general, la condición física de los cazadores es inferior a la del resto de la población, mientras los hábitos de consumo de alcohol y tabaco son muy superiores a la media". Antes de iniciar este estudio de investigación, obtener estos resultados era sólo una hipótesis, que tras realizar diferentes pruebas a 144 cazadores extremeños elegidos aleatoriamente --142 hombres y dos mujeres-- se ha confirmado.

Los datos son concluyentes. El 65% de los cazadores consumen alcohol a diario frente al 14% del resto de la población, de media. En cuanto al tabaco, la disonancia es mucho menor: el 45% de los encuestados fuma a diario frente al 35% de la población general, según los datos de referencia extraídos del Plan Marco de Educación para la Salud de Extremadura 2007-2012.

Para establecer los niveles de condición física, los encuestados se han sometido a diversas pruebas para medir la fuerza manual, el equilibrio, la resistencia, la flexibilidad, la velocidad, la fuerza estática,... "Parámetros que han servido para determinar que la mayoría mantiene un nivel de condición física menor al resto de la población", explica Gamonales, un joven de Alcuéscar. Los datos de referencia para hacer la comparativa pertenecen a estudios realizados en Barcelona y Cuenca. "Aquí carecemos de muestras sobre la condición física de los extremeños, por eso el siguiente paso es determinar la situación de la región y volver a comparar los resultados", señala el director del trabajo, el profesor Kiko León.

Ante estos resultados, José Martín Gamonales plantea en su trabajo una serie de recomendaciones. "La caza depende de muchos factores. Con una mejor condición física el cazador no logrará más rendimiento a la hora de capturar más piezas, pero sí le permitirá aguantar largas jornadas de caza de manera satisfactoria, eficaz y de forma más saludable", apunta. Por eso, la práctica de actividad física, además de ganar tiempo y paliar el coste derivado de la caza, evitará sufrir lesiones. "Incorporando prácticas saludables se evitará la fatiga, esguinces, roturas fibrilares, fracturas, caídas,...", señala el autor.

Gamonales recomienda realizar actividad física aeróbica moderada durante 30 minutos al día: marcha, carrera, ejercicios localizados, musculación, senderismo, mountain bike,..., que además de mejorar la jornada de caza aportará grandes beneficios para la salud. Este trabajo, que se realiza por primera vez en España, servirá ahora de base para elaborar una tesis doctoral. Sus resultados se difundirán en publicaciones de repercusión internacional.