El orgasmo en la mujer es tan complejo y variado como lo es cada propia mujer. El orgasmo es el clímax o culminación sexual que tiene lugar en forma de liberación de energía repentina y muy placentera.

Los espasmos musculares y la liberación brusca de una cascada de hormonas provocan una sensación difícilmente descriptible y que no siempre es experimentada de la misma manera. Las endorfinas serán las máximas responsables de la sensación de bienestar experimentada.

Hoy día podemos encontrar gran diversidad de juguetes y accesorios para ayudar a alcanzar el orgasmo femenino. Para mayor información a este respecto puede visitar tienda online de complementos y erótica sexual.

Aprender a tener orgasmos

A lo largo de la historia los orgasmos femeninos han sido grandes desconocidos y han estado rodeados de tabúes. Mitos, negación y culpabilidad han quedado por fin atrás para darle al orgasmo de la mujer el lugar privilegiado que merece.

Existen mujeres que nunca han experimentado un orgasmo o que tienen dificultades para ello. A este respecto lo más importante es señalar que la erótica y la sensualidad son placenteras en sí mismas, de modo que, tanto las relaciones sexuales como la masturbación, pueden ser altamente satisfactorias sin llegar al orgasmo. Llegar al orgasmo no es obligatorio y debemos alejarnos de toda presión al respecto.

Muchas mujeres logran alcanzar el orgasmo durante la masturbación pero no durante la penetración. En ocasiones pueden existir anorgasmias por causas médicas o fisiológicas, y en otras ocasiones, por cuestiones psicológicas. Hay algunos tópicos muy comunes, como la falta de autoestima o los problemas de comunicación con la pareja.

La prioridad es conocer nuestros propios cuerpos, y para ello nada mejor que explorar a solas en un tú a tú con nuestras respuestas físicas, psíquicas y nuestras fantasías. Se trata de explorar nuestras propias reacciones ante las distintas formas de tocarnos, zonas en las que nos gusta jugar y otras donde no, movimientos que nos hacen sentir placer o relajación.

Ambiente sensual, juguetes sexuales y orgasmos

La autoexploración en solitario puede complementarse con juguetes sexuales y accesorios. Un buen comienzo puede pasar por crear un ambiente relajado y seguro, a través de luces y aromas agradables, velas, inciensos o perfumes.

Aplicarnos a nosotras mismas cremas y aceites es una forma sencilla y natural de ir conectando con nuestra propia sensualidad, como también puede serlo una música que nos transmita o imágenes y películas que nos provoquen sensaciones.

Atrevernos con la aplicación de lubricantes y descubrir diferentes texturas, olores e incluso sabores es otra vía sensorial que puede llevarnos a experimentar placer sexual.

Lejos de situaciones de culpabilidad o vergüenza, a solas con nuestras propias sensaciones y sin prejuicios, quizás nos apetezca probar con algún pequeño estimulador, consolador o vibrador.

La sexualidad femenina es, en definitiva, un universo complejo y muy personal, que pasa por diversas etapas a lo largo de la vida. Compararnos con otras mujeres no suele dar buen resultado, ya que cada una experimenta el placer de modo diferente y dependiendo de infinidad de factores que solo cada una puede llegar a conocer.