Son tiempos de máxima ayuda. Y todos quieren aportar su granito de arena. También los makers, esas personas encargadas de difundir el uso de las tecnologías abiertas y cualquier recurso al alcance de cualquier persona para inventar cosas. Y en estos momentos, lo que más se precisan son elementos y utensilios para personal sanitario y agentes de seguridad.

“Desde que empezó la cuarentena, hicimos un grupo todas las asociaciones de laboratorios digitales de España para ver cómo podíamos ayudar en equipamiento”, reconoce Sergio Aranda, uno de los coordinadores de la asociación Xtrene, encargada del Fablab de Almendralejo que se ha unido al proyecto. Primero pensaron en realizar mascarillas a través de fabricación digital en impresoras 3D, “pero era difícil encontrar un filtro que funcione acorde a la homologación por lo que hemos pensado en proteger mascarillas de otra manera”. El invento son viseras. Sí, viseras que protejan a las propias mascarillas. Para sanitarios, policías, cajeros de supermercados, reponedores y usuarios de Includes.

En el FabLab de Xtrene fueron previsores. Antes de proclamarse el confinamiento, se repartieron las impresoras 3D que estaban en el laboratorio digital del Centro Joven, un edificio municipal que, como todos, ha quedado cerrado a cal y canto. Hay doce personas trabajando en contacto con un grupo de Telegram donde hay casi 8.000 makers de toda España. “Cada uno va imprimiendo sus viseras según el modelo que se manda en formato archivo en el grupo de Telegram. Cuando tengamos un número alto de viseras, las iremos montando y distribuyendo”, dice Aranda. Pero como pasa en muchos colectivos, les falta material y por eso piden ayuda en la donación de tornillos, gomas elásticas o láminas de PVC. Sergio Aranda ha dejado su número de teléfono para cualquier interesado en ser solidario: 652 977 541.

Todo el material se entregará a la policía local de Almendralejo para su distribución. Al proyecto del FabLab almendralejense se han unido también los tres centros de secundaria de Almendralejo: los institutos Carolina Coronado, Arroyo Harnina y Santiago Apóstol. Todos tienen impresoras 3D en los centros y se pondrán manos a la obra para fabricar viseras protectoras de mascarilla, un nuevo invento con gran demanda por el covid-19.

Al mismo tiempo, los doce voluntarios de Xtrene, que realizan todo este trabajo de un modo solidario y altruista, trabajan en la creación de unas palas que sirven para un proyecto a nivel nacional consistente en un respirador automático. El prototipo ya está elaborado en Asturias y sólo falta que el Gobierno de España lo homologue para poder destinarlo a centros sanitarios.

Los makers son personas que siempre han trazado caminos distintos a los del resto de la sociedad, pero hoy día, en estos tiempos que corren donde la creatividad es tan necesaria, son personas muy a tener en cuenta