El parón en las obras de construcción supone una pausa en los trabajos que la Consejería de Educación lleva a cabo en catorce centros de la región. Según la información que ofreció ayer, durante el estado de alarma ya se habían paralizado tres infraestructuras educativas. Es el caso de la reforma integral del instituto Luis de Morales en Arroyo de la Luz, la localidad extremeña más afectada por la crisis sanitaria.

También se detuvo la obra de ampliación en tres unidades de Infantil del colegio Cerro de Reyes de Badajoz, donde a finales de mes comenzó el derribo del antiguo edificio anexo. Durante el estado de alarma se pararon los trabajos del colegio Virgen de la Soledad de Torreorgaz, donde se está construyendo un gimnasio y se está procediendo a la rehabilitación parcial de aulas de Infantil. Además, se ha detenido la obra del colegio Virgen de Argeme de Coria desde hace meses porque se ha modificado el proyecto.

Con motivo de la decisión del Gobierno de detener actividades no esenciales, desde ayer están paradas las obras en otros once colegios. Es el caso de la construcción del nuevo centro de Infantil y Primaria en la barriada de Cerro Gordo de Badajoz, cuya apertura se anunció inicialmente para el próximo curso pero por retrasos anteriores se ha pospuesto hasta el siguiente. También se detiende la construcción de un nuevo colegio de Almendralejo y del nuevo por sustitución de Nuestra Señora de las Nieves de La Zarza.

La lista incluye asimismo la renovación del instituto Miguel Durán de Azuaga, la ampliación y reforma del Alba Plata de Cáceres, el agrupamiento de Nuestra Señora de Piedraescrita de Campanario, la ampliación de Nuestra Señora del Pilar de Don Benito, la reforma del Santa Florentina en Madrigal de la Vera, la ampliación del instituto Albarregas de Mérida y del colegio El LLano de Monesterio, además de las obras del instituto Vegas Bajas de Montijo A. M. ROMASANTA