El matador de toros extremeño Ginés Marín ha recibido el alta hospitalaria este mediodía en el Hospital La Fraternidad-Muprespa Habana de Madrid, donde se encontraba ingresado desde hacía cuatro días tras la grave cornada que sufrió el domingo pasado en la plaza de toros de Las Ventas.
El diestro fue prendido mientras toreaba al desclasado tercero, que soltaba la cara a la altura del embroque, viniéndose por dentro. En uno de esos viajes, el extremeño fue herido en el muslo derecho. Con la suma violencia del astado, el pitón profundizó rápido, levantando al diestro, que estaba toreando asentado en la arena, que ya salió del envite con el muslo abierto y sangrando. Aguantó estoico el diestro en el ruedo sin dar ninguna muestra de dolor hasta matar al toro y recoger la ovación del público, y acto seguido se fue caminando por su propio pie hasta la enfermería.
Ginés Marín fue operado en la enfermería de la plaza de toros de Las Ventas de una ‘herida por asta de toro en el tercio medio del muslo derecho, con orificio de entrada por cara anterior y con dos trayectorias: una ascendente de unos 25 centímetros que alcanza el anillo inguinal y contusiona la arteria femoral, y otra transversal de 20 centímetros que lesiona el recto anterior y presenta orificio de salida en cara lateral del muslo’.
El matador de toros ha querido agradecer al doctor Máximo García Padros y a todo su equipo el trato recibido, así como al equipo médico del hospital Fraternidad-Muprespa de Paseo de la Habana. También ha tenido unas palabras de agradecimiento para la afición tras las muestras de cariño recibidas estos días y en especial al público de Madrid por su reconocimiento y sensibilidad.
Respecto a los tiempos de convalecencia, se descarta su presencia, que sería «una locura», en la corrida del 25 de mayo (la de Fuente Ymbro, con Diego Urdiales y Roca Rey). El objetivo de Ginés es reaparecer el 1 de junio en la Corrida de Beneficencia, con toros de Alcurrucén, acompañado por Morante de la Puebla y un sustituto de Emilio de Justo.
