Tras la semana más fría del año, en la que la mayor parte de España ha sufrido temperaturas bajo cero, lluvias y nevadas intensas, llega la estabilidad. Enero ha sido víctima de una sucesión de borrascas que ha dejado la península helada y ha provocado una bajada drástica en los termómetros. Sin embargo, esta semana, parece volver todo un poco a la normalidad.

Aunque seguirá siendo fría, seca y anticiclónica, apunta la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), los termómetros se recuperarán un poco respecto a lo vivido días atrás. Aun así, el lunes todavía quedará algo de inestabilidad en el estrecho, litoral sureste y sur de Baleares, con probabilidad de chubascos.

Pero a partir de este lunes, las temperaturas comenzarán un “progresivo ascenso” y se situarán en torno a los 18 grados en el Mediterráneo y el Valle del Guadalquivir. De esta forma, se creará una situación estable en la Península con cielos mayoritariamente despejados o poco nubosos. Las mínimas bajarán el lunes (cuando todavía habrá nevadas generalizadas), y luego tenderán a ascender el resto de la semana. Asimismo, los viento serán flojos en el interior pero fuertes en el noreste de Cataluña.