Primer Festejo de la Feria del Toro

Los tres novilleros salen a hombros de Olivenza

Formados en la Escuela Taurina de Badajoz, acreditaron unas buenas condiciones para salir adelante en el arte del toreo

Los tres novilleros salen, ayer, a hombros de la  plaza de toros de Olivenza.

Los tres novilleros salen, ayer, a hombros de la plaza de toros de Olivenza. / Página web de la FIT

Antonio Castañares

Antonio Castañares

Alejandro Talavante está en sus albores como ganadero, y a tenor de lo de ayer, ni mucho menos son malos sus comienzos. En un encierro bien presentado, entraron dos novillos excelentes, primero y segundo, otro muy manejable que fue el tercero, otro, bravucón, que se rajó, pero que incluso en tablas siguió embistiendo y fue el cuarto, y un sexto que sin ser un dechado de bravura, embistió. El lunar fue el muy parado quinto.

Y los tres novilleros, formados en la Escuela Taurina de Badajoz, salieron a hombros tras acreditar los tres unas buenas condiciones para salir adelante en este proceloso arte que es el toreo. Con el aditamento de que Sergio Sánchez y Tristán Barroso debutaron ayer con los del castoreño.

Carlos Domínguez es el más toreado de los tres y sorteó el excelente primero, al que hizo una faena larga con series en redondo muy templadas. Por el pitón derecho con muletazos casi circulares, más hilados que rematados. Y por el pitón izquierdo, el mejor del novillo, lo llevó largo en lo que fue una delicia por cómo el astado lucía su codicia y la profundidad de su embestida -hacia el avión-, con series templadas de largo trazo.

El Juli celebra hoy los 25 años de su alternativa en una corrida con Talavante y Emilio de Justo

El cuarto fue un novillo también enclasado y codicioso, que humillaba y al que Domínguez le corrió la mano con templanza. Hasta que se fue a tablas y en ese terreno y en la corta distancia siguió la faena, con voltereta incluida, sin consecuencias.

Ficha del festejo

GANADERÍA: Seis novillos de Alejandro Talavante, parejos de hechuras y manejables en general. Noble y a más el primero; muy enclasado el segundo; boyante y de muy suave embestida el tercero; noble pero rajado al final el cuarto; parado y sin raza el quinto; mansote pero noble el sexto. Pesos: 454, 464, 472, 469, 495 y 467 kilos.

LOS DIESTROS: Carlos Domínguez, de negro y oro. Estocada (Dos orejas); estocada defectuosa (Ovación con saludos).

Carlos Domínguez, de negro y oro. Estocada (dos orejas); estocada defectuosa (ovación con saludos)

Sergio Sánchez, de rosa y oro. Estocada (Dos orejas); estocada (Vuelta al ruedo)

Tristán Barroso, de rosa y oro. Estocada (Dos orejas); estocada (Oreja)

PLAZA: Olivenza, con tres cuartos largos de plaza cubierta. Sergio Sánchez y Tristán Barroso debutaron con picadores. Los tres novilleros salieron a hombros.

Sergio Sánchez manejó el capote

Sergio Sánchez manejó el capote de forma variada, de rodillas a su primero y por saltilleras en el quite. Sorteo otro gran novillos, que fue el segundo, que tuvo un son excelente, hacía también el avión y tenía un tranco de más. 

Asentado Sergio, corría la mano con dulzura y llevaba al de Talavante hasta el final. Hubo acople de novillo y torero, y toreo expresivo, ese que se da cuando se se carga la suerte y el diestro abarca y se va con el animal. Aunque en tablas el animal se resistió a morir.

El quinto fue el peor del buen encierro, se paró y se negaba a seguir la muleta. Arrimón del torero, que no pudo rematar su tarde.

La faena de Tristán Barroso

Aún muy nuevo, Tristán Barroso apunta muy buenas condiciones. Maneja con soltura el capote a la verónica, y quiere hacer un toreo asentado y vertical, sin que sea encorsetado ni afectado, todo hecho con naturalidad. Y con cabeza, algo importante.

Echaba el tercero un puntito las manos por delante y Tristán le ayudó en el comienzo de faena por alto. Siguió en redondo con la diestra, y al natural, con dulzura en las muñecas, todo a favor del noble animal que tomaba con clase la tela aunque le faltaba un puntito de transmisión. Faena larga y templada, se gustaba el joven torero ante un animal boyante.

Al sexto le faltó un puyazo porque solo tomó dos picotazos. Por eso se movió sin temple en su embestida, hasta que el torero le atacó, le bajó la mano, y, si bien mejoró, se fue a tablas al sentirse podido. En ese terreno siguió la que fue una larga faena con momentos de cierta brillantez.

Tarde muy significativa que da cuenta de la bonanza del arte del toreo en nuestra tierra.

Hoy será la primera corrida con toros de Domingo Hernández para El Juli, que celebra el 25 aniversario de su alternativa, Alejandro Talavante y Emilio de Justo. Y mañana, corrida mixta, para Diego Ventura Ferrera y Leo Valadez (matinal). Por la tarde, Manzanares, Roca Rey y Pablo Aguado. 

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