El mapamundi, basado en un engaño: Así cambia cuando ajustas los países a su verdadero tamaño

La forma que tenemos de ver el mundo a través de nuestros ojos no se ajusta a la realidad, por ello, estudiamos los mapas disponibles con las proyecciones del mundo más populares y, para muchos, correctas. Lo cierto es que llevamos siglos basándonos en una distorsión visual que no termina por desmentirse.

El geógrafo, matemático y cartógrafo alemán Gerardus Mercator publicó su proyección en 1569 sin saber que a día de hoy, todavía sería una de las principales a pesar de sus incongruencias. Necesitas 7.200 kilómetros para cruzar África y 6.400 para cruzar Rusia, pero el mapa dice lo contrario: expone a Rusia el triple de grande que el continente africano.

Al representar sobre un plano una figura esferoide como la Tierra, todos los cartógrafos deben dejar vía libre a su imaginación para que el mapa cuadre, y los terrenos encajen unos con otros. Estirar una península a lo largo y a lo ancho; cambiar la perspectiva desde la que contemplamos los continentes; modificar escalas. La verosimilitud se pierde pero cumple el objetivo del mapa: localizar geográficamente un lugar.

Es más, este mapamundi en concreto, con el que todos estamos familiarizados, buscaba hacer más sencilla la navegación y no le importaba deformar el tamaño de los países. Por eso, Groenlandia aparece más grande que África, cuando realmente África es 14 veces más grande.

Muchas más proyecciones (menos distorsionadas) han surgido a lo largo de los años, pero el problema viene cuando a principios del siglo XXI las nuevas herramientas de exploración cartográfica, como Google Maps, recurrieron a la ancestral proyección del alemán.

Lógico si observamos los países que más se han favorecido en el mapa, al aumentar considerablemente su tamaño. Es un terreno cómodo para los lectores americanos o europeos. Latinoamérica, África y la India son algunos de los casos en los que se respetó su tamaño, porque quizás, no interesa(ba) extender el conocimiento de que los países más desarrollados son tremendamente inferiores en tamaño a los subdesarrollados.

Afortunadamente, la realidad detrás de los mapamundis se va extendiendo cada vez más gracias a las redes sociales y su capacidad para difundir, visibilizar e informar en un mundo globalizado. Por ello, recientemente Google Maps decidía desprenderse del cartógrafo alemán y dotar de forma esférica a sus mapas.

A continuación, se puede observar cómo cambia el mapa al mostrar el verdadero tamaño de los países del mundo respecto a la proyección errónea de Mercator. El usuario neilrkaye lo ha compartido en su perfil de Reddit.

Aunque poner el tamaño real de los países es una tarea muy sencilla, todo se complica al intentar ensamblarlos. En el caso de América es relativamente sencillo, pero en Asia es algo imposible: Rusia no podría rellenar todas sus fronteras y dejaría descolgadas al resto de Asia o a Europa, dependiendo de dónde se colocara.