El hombre alemán acusado de secuestro parental al que buscaban en Tenerife dio pistas sobre su paradero cuando se registró en un establecimiento alojativo en Portugal junto a sus dos hijos, de 11 y 10 años, informaron a Efe fuentes de la investigación este martes.

Todos los establecimientos, ya sean hoteles, apartamentos, hostales u otros, de la UE están obligados a remitir a las autoridades policiales los partes de entrada y registros de viajeros.

Al estar en vigor una orden internacional de detención y presentación dictada el pasado 20 de agosto por el Juzgado de Instrucción 1 de Santa Cruz de Tenerife -y no por el número 2 como se venía informando hasta ahora, tal y como puntualizan fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Canarias- saltaron las alarmas.

La Policía Nacional contactó con las autoridades portuguesas, y la Policía Judiciaria lusa procedió este martes a la detención de Lorenc Toska, de 44 años, en la ciudad de Peniche, a unos 85 kilómetros al norte de Lisboa.

Durante la actuación de las fuerzas policiales lusas también se cumplió con las tres órdenes de localización internacional de sus dos hijos, emitidas por las autoridades tanto de España como de Alemania.

En un principio, la Policía Nacional centró la búsqueda en el sur de Tenerife, donde se habían establecido padre e hijos sin el permiso de la madre, que había presentado una denuncia por lo civil en Alemania el pasado enero.

El detenido será puesto a disposición de la autoridad judicial de la ciudad portuguesa de Coimbra (distrito al que pertenece Peniche) en las próximas horas.

Por otro lado, según la Policía Judiciaria, los menores, Kristian y Amantia Toska, de 11 y 10 años, respectivamente, serán entregados para su custodia a la Comisión de Protección de Niños y Jóvenes (CPCJ), hasta que haya una decisión firme del Tribunal de Menores portugués.