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Juicio en la Audiencia de Barcelona

Los miembros de la 'manada' de Castelldefels reconocen la violación de tres jóvenes y pactan una condena mínima

De una petición provisional de 28 a 53 años se ha pasado a una condena que oscila entre los tres años y 11 meses y los ocho años y cinco meses, tras un pacto entre fiscalía, acusación y defensas

Tras reconocer los hechos y alcanzar el acuerdo, que según las partes busca evitar la revictimización de las mujeres, la defensa ha pedido la excarcelación de los acusados

Un dels membres de la ‘manada’ de Castelldefels.  | EL PERIÓDICO

Un dels membres de la ‘manada’ de Castelldefels. | EL PERIÓDICO

Barcelona

Los cinco miembros de la 'manada' de Castelldefels, acusados de la violación de tres jóvenes entre marzo y mayo de 2021, han reconocido que violaron a tres jóvenes en el domicilio de uno de ellos y durante las restricciones por la pandemia del covid. La defensa de los procesados ha llegado a un acuerdo con la fiscalía y las acusaciones particulares, en nombre de las víctimas, para rebajar de forma significativa la pena que provisionalmente se solicitaba para ellos –de 28 a 53 años de cárcel– hasta una condena mínima que oscila de tres años y 11 meses a ocho años y cinco meses de presión. El tribunal ha dictado sentencia 'in voce' y la defensa ha solicitado la suspensión de la ejecución de la condena, lo que significaría la libertad de los imputados. La fiscalía se ha opuesto. Los magistrados decidirán en los próximos días.

El juicio, que debía alargarse siete días, se ha iniciado este martes en la Audiencia de Barcelona y ha quedado reducido a una única sesión. Haciendo uso del turno de última palabra, los procesados han pedido perdón a las mujeres agredidas sexualmente y han mostrado de palabra su arrepentimiento, uno de los requisitos establecidos en el pacto suscrito por las defensas y acusaciones. "Pido disculpas a ellas y a sus familias; hemos intentado reunir dinero para reparar el daño causado", ha dicho uno de los procesados. "Quiero mostrar mi absoluto arrepentimiento y pedir perdón a las víctimas de corazón", ha añadido otro. Y así uno tras otro, ante la atenta mirada del tribunal.

Disminución de la pena

Para aplicar esta disminución se les ha aplicado las atenuantes de reparación del daño, al pagar la indemnización a las víctimas; confesión, y arrepentimiento. De la acusación se ha suprimido la imputación de que las agresiones sexuales fueron continuadas, así como la revelación de secretos por haber grabado en un hotel relaciones sexuales –en este caso consentidas–, ya que el vídeo fue distribuido en un chat y fue eliminado de forma automática. Sí que ha permanecido la imputación de pertenencia a grupo criminal por haber actuado de común acuerdo en las violaciones: unos como autores o coautores y otros como cooperadores necesarios. "Creo que jurídicamente es un buen acuerdo, aceptado tanto por las acusaciones como por las defensas, y al que no se habría llegado sin ponderar lo incierto del juicio para todas las partes y lo que supondría también para denunciantes y acusados", según ha asegurado el abogado defensor, Juango Ospina.

Tanto la fiscalía como las acusaciones han justificado la importante rebaja de pena para evitar una revictimitzación de las víctimas: consideran que el pacto evita un juicio que podría haber traumatizado aún más a las mujeres. En una nota pública, el ministerio fiscal también apunta a que ha tenido en consideración el riesgo de una eventual suspensión del juicio, tras haber constatado que una de las víctimas sufre una crisis postraumática que hacía inviable su presencia en sala, así como las consecuencias que la prolongación del procés penal podría haber provocado en la salud emocional de las mujeres.

Según el acuerdo alcanzado, también se han reducido la indemnización que cobrarán las víctimas: una de ellas percibirá solo 30.000 euros, cuando la fiscalía reclamaba 50.000 euros; otra recibirá 30.787 euros, cuando reclamaba 89.000, y la tercera cobrará 33.000 euros, cuando se exigían 73.000. Por delitos, la máxima condena por uno de ellos, en concreto por las agresiones sexuales, es de dos años y tres meses.

Redes sociales

Según el escrito de acusación provisional del fiscal, estando vigentes las restricciones de movilidad por la pandemia del covid, los procesados, aprovechando esta situación y "puestos de común acuerdo", contactaron a través de redes sociales con jóvenes que, por cualquier circunstancia médica o personal, "tenían baja autoestima". Una de las víctimas, por ejemplo, sufre una discapacidad consistente en una distonía generalizada y epilepsia que conlleva la toma diaria de medicación.

Una vez se ganaban su confianza, los procesados les proponían mantener encuentros que, a raíz de la pandemia, tuvieron lugar en el piso de Alejandro Raúl P. C. en Castelldefels. A dichas fiestas, prosigue la fiscalía, acudieron de manera voluntaria las víctimas, "ajenas al carácter grupal y sexual de las mismas". Los acusados, en cambio, sí que iban "con el conocimiento y voluntad de atentar contra la indemnidad sexual de las jóvenes, creando en dicha vivienda un clima de sometimiento que llegó a mermar e incluso a anular la capacidad de reacción" de las mujeres.

Los cinco procesados formaban parte, junto con otras personas, de un grupo de Whatsapp de nombre 'K-Team' y que era utilizado, incide la fiscalía, por "los integrantes de la trama" para seleccionar a las jóvenes que querían llevar a la vivienda de Castelldefels y en el que, además, se "mofaban" de lo que pretendían hacer con ellas. Por ejemplo, el 27 de marzo de 2021, se compartió este audio: "Yo a las siete busco al... empezamos a buscar a la peña y buscaremos niñas, ¿vale?". Ahora solo falta saber si los procesados saldrán o no en libertad, ya que han cumplido parte de la pena impuesta.

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