No es de extrañar que ciertas partes de nuestras casas se llenen de hormigas. El aumento de las temperaturas deriva en que estos insectos aparezcan en las zonas más insospechadas. Aunque, en principio las hormigas no suponen ningún problema para la salud, no es agradable verlas paseando por nuestro hogar.

Por ello, te presentamos algunos de los mejores remedios naturales que hay para combatir la presencia de estas.

Hierbas y especias. Colócalas en armarios y cajones para que desprendan un fuerte y así repeler a las hormigas.La canela, la pimienta negra o el ajo cumplen la misma función, por lo que prueba a espolvorear esas especias en zonas donde has visto hormigas.

Cáscaras de pepino y cítricos. Las hormigas las evitan, ya que al descomponerse se vuelven tóxicas para ellas.

Bórax. Mézclalo con agua y azúcar y esparce la pasta que se crea en los rincones donde veas hormigas.

Menta. Ponlas alrededor de las ventanas y puertas y por las grietas por donde acceden estos insectos.

Vinagre (mezclado con agua a partes iguales). Su fuerte olor te ayudará a repelerlas. Además, el vinagre elimina los rastros de olor que utilizan estos insectos para moverse, por lo que es muy eficaz. Espárcelo por los rincones más concurridos por hormigas, prestando especial atención a las encimeras, fregadero y ventanas.

Granos de café. Otro repelente por olor. Colócalos en puntos estratégicos, como el jardín y alrededor de la parte exterior de tu casa.

Jugo de limón. Les perturba su sentido de la orientación.

Harina de maíz. Interrumpe los rastros de olor de las hormigas y provoca lo muerte de los insectos que lo ingieren, ya que son incapaces de digerirlo.

Polvos de talco o tiza. Un ingrediente de la tiza y los polvos de bebé es el talco, que es un repelente natural de hormigas.

Bicarbonato de sodio y azúcar. Es una mezcla nociva para el cuerpo de las hormigas, por lo que huirán de ella.