A lo largo de este año se ha potenciado la polémica sobre el precio de la luz debido a su progresivo aumento. Independientemente de las razones que hayan provocado dicho ascenso, lo que está claro es que ahorrar es una prioridad para muchas familias españolas que tiemblan al ver la factura de la luz a final de mes.

Uno de los lugares de la casa donde más electricidad se utiliza es la cocina. Por ello, queremos comparar dos electrodomésticos muy utilizados para cocinar y así, sacarte de dudas acerca de cuál de ellos gasta más.

La freidora de aire o sin aceite es un electrodoméstico que ha ganado mucha popularidad en los últimos años. Sin embargo, ¿es más ahorradora en el consumo de electricidad que el horno convencional?

Este tipo de freidora consume tanto como lo haría un horno eléctrico normal, un lavavajillas o una tetera. Los expertos la consideran un electrodoméstico “intensivo en energía”, es decir, consume mucha energía al usarla.

Para salir de dudas, un horno convencional conlleva un gasto de 42 céntimos la hora, mientras que la freidora son 70 céntimos por ese mismo periodo de tiempo (aunque su tiempo de uso es menor). Por lo tanto, el consumo general puede ser muy parejo, ya que la freidora consume más, pero necesita menos tiempo de cocción.