Una vez pasado el verano, es momento de limpiar las mosquiteras. Durante esos tres meses, nos hemos expuesto a una plaga de mosquitos e insectos peligrosos y molestos, en especial durante la noche. Por ello, las mosquiteras están sucias y llenas de restos de mosquitos.
Es necesario quitar las mosquiteras para su lavado y eliminar el polvo y manchas que se han acumulado. A continuación, te explicamos cómo hacerlo sin que se rasguen o estropeen.
En cuatro pasos
- Hazte con un barreño lleno de agua, plumero (de preferencia de microfibra), jabón neutro, cepillo suave de ropa, amoniaco y toallas.
- Desmonta la mosquitera con cuidado y llévala a un sitio donde no haya problema si cae sucio.
- Lo primero que debes hacer es quitarle el polvo superficial con el plumero y retirar lo máximo posible de la superficie.
- A continuación, humedece la tela con agua o déjala en remojo en un barreño por 5 minutos para que se despegue el polvo y la mugre que no se pudo retirar con el plumero.
- ¡Ahora sí, empieza la acción! Agrega al agua el jabón con pH neutro de tu preferencia y frota con una esponja suave hasta que quede limpia. Bastará con dos cucharadas de detergente si solo requieres quitar el polvo, pero si la suciedad es muy persistente, añade media cucharada de amoniaco, con ello no solo limpiarás sino que también la desinfectarás.
- Aclara con abundante agua fría hasta retirar todo el jabón y extiéndela bien para que se seque completamente. Es idóneo que reciba suficiente luz del sol para que no guardarla húmeda, y que el moho la cubra y la dañe.
En caso de que sea una mosquitera fija, retira el polvo con el aspirador, cepilla con agua tibia jabonosa, aclara con una esponja empapada de agua y sécala con un pañuelo limpio.
