Los vecinos del edificio derrumbado el pasado miércoles en Peñíscola, en el que fallecieron un menor y una mujer y resultó herido un joven, han empezado a entrar en las viviendas de forma escalonada y durante diez minutos para recoger sus enseres personales más necesarios. El inspector jefe del Consorcio de Bomberos de Castellón, Pablo Vilagarcés, ha explicado que en la reunión de coordinación con la Policía Local y la Guardia Civil han detallado el dispositivo y han acordado dar este tiempo y que accedan tres familias a la vez, con dos miembros, acompañados de un bombero y un guardia civil.