Ya es hora de ir organizando planes para las vacaciones de verano y qué mejor que hacerlos en Extremadura. Concretamente, la provincia de Cáceres tiene lugares a los que miles de turistas asisten cada año. Al patrimonio histórico y cultural hay que añadir espacios naturales impresionantes, como el Parque Nacional de Monfragüe, una oferta gastronómica rica y variada, y muchas opciones de ocio y diversión.
Por ello, queremos recomendarte algunos de esos lugares para que aproveches tu periodo vacacional de la mejor manera posible.
Sierra de San Pedro - Alcántara
Está situada al occidente de Cáceres y al norte de Badajoz. La Sierra de San Pedro es una «Zona de Especial Protección de Aves» (ZEPA) y una «Zona Especial de Conservación» (ZEC) con un ecosistema que es la representación típica del bosque y matorral mediterráneo en Extremadura. Su extensión es de 115.178 hectáreas y divide las cuencas de los ríos Tajo y Guadiana.
Alcántara fue sede de la Orden que lleva su nombre. El legado de la Orden de Alcántara se aprecia en la ciudad y en toda la zona. El conventual de San Benito o la iglesia de de nuestra señora de Almodóvar son buenos ejemplos. Uno de los monumentos mejor conservados tanto a nivel regional como nacional es el puente romano de Alcántara.
Ciudad de Cáceres
Lo más característico de Cáceres es su impresionante centro histórico, uno de los conjuntos arquitectónicos mejor conservados de la Edad Media y el Renacimiento. Además de la plaza Mayor, destacan varios palacios e iglesias, entre otras edificaciones. Las tapas en la plaza Mayor son un must para cualquier turista que decide visitar la ciudad cacereña. La visita se puede hacer en 1 día, aunque lo recomendable para disfrutar de Cáceres sería como mínimo un fin de semana.
Por otro lado, hay más lugares que valen la pena visitar ya sea por su atractivo o gastronomía, como es el Nuevo Cáceres, Cáceres Viejo, el parque del Rodeo, el parque del Príncipe o, para los más futboleros, el estadio del Cacereño, el Príncipe Felipe.
Ciudad de Plasencia
La ciudad de Plasencia posee un patrimonio histórico-artístico realmente impresionante, con dos catedrales, multitud de casas-palacio, las murallas y otros monumentos emblemáticos. Este verano podremos disfrutar de las piscinas naturales que forma el río Jerte a su paso por Plasencia, en la zona de La Isla.
Su situación geográfica la convierte en un punto ideal para conocer todo el norte de Extremadura: Valle del Jerte, La Vera, Monfragüe y su entorno, Valle del Alagón, Valle del Ambroz y Trasierra - Tierras de Granadilla.

Parque Nacional de Monfragüe
Este espacio natural protegido es atravesado por dos ríos, el Tajo y el Tiétar. Se declaró parque natural el 4 de abril de 1979 y parque nacional el 2 de marzo de 2007. Con 288.644 visitantes en el año 2015, Monfragüe fue el duodécimo parque nacional de España en el ranking de mayor número de visitantes.
Predominan tres hábitats principales: el bosque y matorral mediterráneo, las dehesas, los roquedos y las masas de agua (ríos y embalses).
Valle del Jerte
Situado en el extremo nororiental de Extremadura, limita al norte con las provincias de Ávila y Salamanca, al oeste con el Valle del Ambroz, por el sur con la ciudad de Plasencia y al este con La Vera. El valle está declarado bien de interés cultural desde 1973 y está formado por once municipios, agrupados en la Mancomunidad de Municipios del Valle del Jerte, que consta de 10.648 habitantes.
Aquí podréis encontrar numerosas gargantas (como la Garganta del Infierno), caídas de agua y piscinas naturales.