Presidente de la Junta Rectora de Monfragüe

El Parque de Monfragüe es el reducto más importante que existe en el mundo del ecosistema de bosque y matorral mediterráneo ; es un refugio que ofrece tranquilidad, y lugares propicios para criar, a muchas especies que se encuentran al borde de la extinción.

El territorio que ocupa su biocenosis sobrepasa, con mucho, sus actuales límites, llegando a las doscientas o trescientas mil hectáreas.

Pero además de monte, sierra, cantiles, dehesas... los ríos y arroyos son también Monfragüe. El agua de lluvia, como si de la más preciada de las joyas se tratara, es recibida, interceptada, retenida, almacenada, saboreada, asimilada, filtrada, escondida, protegida, escurrida, drenada, controlada y conducida por cauces crecientes hasta el gran río Tajo.

Vivificante circuito que propicia miles de microbiotopos con una elevada diversidad biológica que se muestra palpitante en fuentes y arroyos; así nacen los afluentes del Tajo, que controlan la agresividad del agua en sus cauces, empapan sus bellísimos sotos y albergan una enorme variedad de especies en sus alargados y sinuosos ecosistemas fluviales .

Todos ellos son también parte de Monfragüe.

A principios de los 60 surcaban Monfragüe el Tiétar y el Tajo; hoy están embalsados por las presas de Alcántara, Torrejón-Tiétar, Torrejón-Tajo y Valdecañas. Ni el Tajo ni el Tiétar son ya Monfragüe , han dejado de formar parte de sus ecosistemas fluviales, sólo son depósitos alargados que se llenan o vacían según demandas ajenas a los ciclos naturales de un ecosistema fluvial; sus aguas suben y bajan, en fuertes oscilaciones, de unos embalses a otros, a través de centrales reversibles, en función de los ritmos circadianos del consumo eléctrico. Así ni las plantas pueden colonizar sus orillas, ni la fauna terrestre encuentra cobijo en ellas, ni la fauna acuática puede vivir en tan inestable medio. Los embalses del río Tajo constituyen una franja estéril que aísla las comunidades de sus márgenes, erosiona sus orillas, fomenta las especies exóticas y ocupa valiosos biotopos para la fauna propia.

Recientemente estas aguas han sido motivo de alarma por la difusión de los resultados de una tesis doctoral de un licenciado de la Uex. Aprovechando la invitación que me hace mi viejo amigo José Luis Guerra, quiero aclarar que Monfragüe no padece ninguna amenaza , sino todo lo contrario. Ya comienzan a verse los frutos de muchos años de trabajo callado y de esfuerzos conjuntos, pues toda la plantilla de Monfragüe está formada por verdaderos profesionales , desde el director, hasta el más joven de sus guardas, que viven para su trabajo y lo disfrutan. De esta forma, mejoran el biotopo y las especies, aumentan las actividades educativas, se incrementan las visitas sin perder el control, mejoran las relaciones con los habitantes del entorno, crecen aires muy favorables para el desarrollo sostenible de los recursos naturales del parque y comienza a verse la realidad que debe ser el parque a corto plazo.

Prueba de ello es que este año hayan criado 212 parejas de buitres negros y 12 de águilas imperiales, que han sacado 12 pollos, al tiempo que, en la encuesta realizada por la revista Biológica, el Parque de Monfragüe quedara en cuarto lugar, entre los 40 principales Parques de España, detrás de Picos de Europa, Doñana y Ordesa.

Hace décadas que la comisaría de aguas del Tajo analiza mensualmente más de cien parámetros en sus aguas, incluidos el aldrín, DDD, DDE, DDT, dieldrín, endosulfán, endrín, HCH, heptacloro, isodrín, etcétera, y medidas similares se realizan en las aguas del río Guadiana y las demás cuencas, sin que se haya producido ningún motivo de alarma. La Junta Rectora del Parque de Monfragüe, en función de sus atribuciones, se mantendrá alerta ante los resultados de estos análisis y propiciará los estudios adicionales que fueran necesarios.

La reciente Directiva Marco del Aguas, 2000/60/CE del parlamento Europeo y del Consejo, que entrará en vigor el 23-10-2003, abre una nueva etapa al incrementar los niveles de control de forma muy significativa y exigir, además, indicadores biológicos de fitoplancton, macrofitos y organismos fitobentónicos, fauna bentónica de invertebrados y peces.

El objeto de la directiva es establecer un marco para la protección de las aguas y los ecosistemas acuáticos, y Monfragüe cuenta con numerosos y valiosos ecosistemas acuáticos en todos los afluentes del Tajo. Por tanto, nuestra misión, y la de los órganos de cuenca, es mejorar los procesos ecológicos de los ecosistemas fluviales de Monfragüe y fomentar un desarrollo sostenible de los recursos naturales que mejore la calidad de vida de los vecinos de los siete municipios que lo sustentan. ¡En eso estamos!