Entre el martes y este miércoles operarios de la Ute a la que Adif ha adjudicado el acondicionamiento de líneas para prepararlas para la alta velocidad han reforzado la protección del puente sobre la vía que comunica Cáceres con Aldea Moret. Es el principal acceso que hay hasta el barrio, uno de los dos en los que la vía es una barrera que los separa del resto del casco urbano. El otro es el Junquillo. Este refuerzo del puente coincide con las obras de reforma de la estación, adjudicada hace un año a una unión temporal de empresas entre las que está la cacereña Sevilla Nevado.
La protección colocada en el puente incorpora un sistema de detección de caída de objetos de gran volumen a la vía, «manda una señal a la central de mandos y se para el tráfico» ferroviario hasta que se subsane la deficiencia, según se informó este miércoles por parte de la Ute Abi Corredor Oeste, que acomete el acondicionamiento de líneas en el tramo extremeño para prepararlas para la alta velocidad.
Dentro del tramo urbano de Cáceres se intervendrá en dos puentes, en el que comunica Aldea Moret con el resto del casco urbano y en el falso túnel que se construyó al sur de la ciudad en la N-523 (carretera de Badajoz) en las obras de conexión de la red convencional con la plataforma de alta velocidad ferroviaria.
Según informó Adif en un resumen de las obras de reforma que hasta junio se habían realizado en la estación, hasta ahora se ha intervenido en los accesos a la plaza que se urbanizará para llegar a la estación y en el espacio del futuro párking, que ya no estará delante de la fachada principal de la estación, sino en un lateral, en un nuevo espacio que se habilita para estacionamiento. También se trabaja en el interior del edificio -se cambiará el vestíbulo y la cafetería tendrá otra entrada- y en los andenes y marquesinas exteriores, se ha cortado parte de las mismas para conseguir espacio para «la subestructura de electrificación».
Retirada de árboles
En la zona de acceso a la estación se ha retirado parte del arbolado. Según Adif, se han visto afectados un ejemplar de casuarina «por incompatibilidad con la nueva urbanización», cuatro ejemplares de mimosa «por ser una especie exótica invasora» y dos ejemplares de robinia y de álamo «por su mal estado fitosanitario». El resto de los árboles «que se encuentran en la zona de actuación han sido adecuadamente protegidos para evitar afecciones durante los trabajos de ejecución de la nueva urbanización» según detalló el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias.
Para compensar la pérdida de este arbolado que se ha retirado se «procederá a la plantación de nuevos ejemplares de especies autóctonas, tales como madroños, encina, olivo y almez acompañados de ejemplares de liquidambar propuestos por el ayuntamiento», segun informó Adif.
Hasta 2013 se estaba planteando el traslado de la estación, ya que las vías son una barrera que separa barrios de la ciudad, pero ese año Adif acordó un nuevo modelo de desarrollo de los corredores de la alta velocidad ferroviarios, en el que la estacón se quedaba en el mismo sitio.
También se actúa en la fachada del edificio de la estación, inmueble protegido por el plan de urbanismo, donde se colocarán «un conjunto ligero de lamas de aluminio horizontales», detalló Adif.
