«Con absoluta normalidad» y sin cambios. Los docentes interinos extremeños no se incorporarán a los centros educativos el 1 de septiembre, la fecha en la que inician su actividad el resto de sus compañeros funcionarios y la que exigen los sindicatos docentes que han ganado varias sentencias en los tribunales, sino que será como viene siendo habitual después del 7 de septiembre y antes del inicio de las clases, que comienzan el día de 10 de ese mes. «Se van a incorporar antes de la actividad lectiva, como siempre». Este fue el periodo de incorporación que avanzó ayer el director general de Innovación e Inclusión Educativa, Juan Pablo Venero, en la Comisión de Educación y Empleo de la Asamblea, en respuesta a una pregunta del diputado de Unidas por Extremadura Joaquín Macías sobre cómo prevé la Junta de Extremadura que los interinos preparen el curso próximo.

En su respuesta, Venero se mostró «razonablemente satisfecho» porque los procesos de interinos no se han visto afectado por la alteración de los ritmos administrativos que sí han sufrido otros sectores, de modo que la valoración de los méritos se ha hecho «en tiempo y forma», gracias también al nuevo sistema de llamamiento telemático. Dijo que la mayoría de ellos elegirá destinos entre finales de julio y principios de agosto, como viene siendo habitual. El director general reconoció que el inicio de curso es siempre «complejísimo», más aún en el nuevo escenario marcado por el covid-19, lo que requiere que todos los miembros de la comunidad educativa trabajen juntos.

De cara al próximo curso, los cinco sindicatos docentes de la mesa sectorial (CSIF, PIDE, ANPE, CCOO y UGT), tras finalizar sus protestas, reclamaron ayer una reunión presencial y urgente con la consejera de Educación para abordar la organización del nuevo curso.