La guerra en Ucrania ha limitado mucho las conexiones de Rusia con otros países. Tanto es así, que ha sido sometida a graves sanciones que han disminuido su capacidad de exportación e importación de diversos productos, como es el caso del whisky escocés, uno de los favoritos de los rusos.

Para traer este producto de vuelta a Rusia, según el portal de noticias 'Mirror', Rusia recurre a lo que se llama 'el mercado gris', es decir, que los bienes pueden suministrarse sin el consentimiento del fabricante, propietario o titular de la licencia para introducirlos en Rusia.

Esta furtiva puerta trasera en el comercio ya cubre alrededor de 200 grandes marcas, incluidas Apple, Marvel, Disney Pixar y DC Comics. Ahora, el líder ruso quiere incluir prestigiosas marcas como Macallan, Bowmore, Lagavulin, Jägermeister, Jack Daniel's, Jim Beam o Malibu, que anteriormente estaban disponibles en Rusia.

Recientemente, se filtraron documentos firmados por Putin en los que legalizaba importaciones paralelas en junio de 2022 para contrarrestar las sanciones de Reino Unido, Estados Unidos y la Unión Europea. De esta forma, Putin elude las prohibiciones comerciales existentes al obtener los artículos de otras naciones que no han dejado de comerciar con el país, como China, India y Turquía.

También se intentará importar a través del mercado gris automóviles, productos químicos, electrodomésticos, videoconsolas, ropa, zapatos y juguetes. Putin ha dictaminado que se puede importar cualquier artículo que no se fabrique en Rusia.