"No tenemos síndrome Bryant ", se esforzó ayer en declarar Jalen Rose, alero de Toronto Raptors, en referencia a los 81 puntos encajados por un solo jugador el domingo y que han conmocionado a la NBA. Pese a ello, el equipo canadiense perdió en su siguiente partido, en la cancha de Denver Nuggets, por 107-101, con el villanovense José Manuel Calderón sin remontar en su número de minutos. Esta vez Sam Mitchell le concedió 14, en los que anotó tres puntos (0/2 en tiros de dos y 3/4 en triples) y dio dos asistencias.

Los Raptors dicen haber olvidado la histórica humillación del domingo frente a Los Angeles Lakers y de hecho en Denver se fueron al descanso por delante (52-54), pero a partir de entonces les faltó gas. Que los dos equipos jugaron a velocidades distintas lo evidencia un dato: los locales anotaron 36 puntos al contraataque y los visitantes 15.

POCO PRODUCTIVO El de Denver ha sido el último partido de los Raptors en una gira por el oeste saldada con una victoria --ante Seattle-- y cuatro derrotas. En sólo el primero, en Utah, Calderón ha superado los 20 minutos en pista y, lo que es más preocupante para su progresión, en ninguno ha dado más de tres asistencias, su especialidad en el inicio de la competición.

Toronto --con 14 victorias y 28 derrotas-- vuelve a jugar esta misma noche en su cancha frente a Chicago Bulls.