El escritor sueco Henning Mankell, que ayer recibió en Barcelona el Premio Pepe Carvalho por su trayectoria en el género de la novela negra, opina que "a pesar de que un libro no cambia el mundo, no podemos cambiar el mundo sin cultura".

Durante un encuentro con los medios de comunicación ayer en la ciudad condal, Mankell, creador del famoso detective Kurt Wallander, con el semblante serio, pero haciendo gala de un excelente sentido del humor, remarcó que es de los que cree que "la literatura puede tener y debe tener un impacto sobre este mundo tan terrible e injusto en el que vivimos".

Novelista y dramaturgo nacido en Estocolmo en 1948, Mankell ha escrito unas cuarenta obras, y en la actualidad reside entre su ciudad de origen y Maputo, en Mozambique, donde dirige el Teatro Nacional Avenida.

Colonialismo Precisamente, en su comparecencia ahondó en los problemas del continente africano, que achaca, en parte, a los 400 años de colonialismo europeo. Asegurando que los medios de comunicación son los responsables de ofrecer una imagen deformada de Africa -"sabemos cómo mueren pero no se explica nada sobre cómo viven".

Además, los occidentales "tenemos la responsabilidad de ayudar a esta gente, en nombre de la humanidad". Respecto a las corrientes migratorias, lamentó que cada día lleguen refugiados muertos a las costas de España y se preguntó: "¿Esta es la Europa que queremos? No. Esto es una vergüenza y un problema de todos, no sólo de los españoles".

En cuanto a la novela negra, tras aseverar que la mejor del género es Macbeth , mantuvo que su inventor no es Edgar Allan Poe, sino que "fue inventada cuando nació la literatura, y es una de las tradiciones más antiguas que tenemos".

Este hecho ocurre porque "usando el espejo del crimen, este tipo de literatura nos dice muchas cosas sobre la vida, y sobre cómo somos los seres humanos".

Respecto a las aventuras de Kurt Wallander, dijo que su éxito se debe, entre otros, al "síndrome de la diabetes, ya que sufriendo esta enfermedad se hace cercano a muchos, a la vez que es alguien que cambia constantemente de opinión".

También es popular porque "se preocupa por las relaciones entre el sistema de justicia y la democracia. Todos sabemos que si no podemos tener un buen sistema de justicia, la democracia está bajo riesgo".