El Femenino Cáceres regresó ayer a los entrenamientos con solamente seis jugadoras. Dos de las componentes de su plantilla ya se sabe que no volverán: las pívots Abril García y Marta Dydek, que se han cansado de los impagos del representante extremeño en la segunda categoría nacional del baloncesto femenino y se han acogido a cláusulas de sus contratos para poder rescindirlos.

En el caso de la mexicana, ha sido una sorpresa, pues tenía billete de avión confirmado para regresar desde su país tras las vacaciones navideñas. Lo que estaba cantado, como publicó este diario, era el adiós de la polaca Dydek, que firmará por el Canoe.

A ello se une que tampoco apareció la norteamericana Ashley Huff, que, pese a que voló desde Estados Unidos, no pudo salir del aeropuerto de Madrid-Barajas al no tener el visado en regla y debió dar la vuelta para formalizar nuevos trámites. Un inconveniente que se espera resolver para el partido del sábado ante el Adba... con otro viaje intercontinental de por medio.

Para suplir a García y Dydek, el club intenta recuperar a Melissa D´Amico, que ya jugó en el Femenino Cáceres la pasada campaña.